En esta que se desarrolló la semana pasada, se tuvieron en cuenta varios puntos que empezarán a regir a partir de esta semana con el fin de prestar de la mejor manera posible el servicio a los habitantes del municipio, especialmente a los de zonas rurales, que son los que más dificultad tienen para desplazarse.

El mandatario local, Jorge Iván Vásquez Martínez, expresó que la idea era permitir que tanto oficiales como no oficiales tuvieran derecho al trabajo, por lo que se establecieron cuatro puntos.

“El primero de ellos es que tanto motos como motocarros y mototaxis deben organizarse en asociación para que de esta manera se limite el número de personas que labora en esta actividad económica”, refirió.

Asimismo, el segundo tiene que ver con que se les otorgó dos meses máximo para que cumplan con los requisitos para movilizarse, como lo son tener al día licencias de conducción, seguro obligatorio y revisión tecnomecánica.

Y en cuanto a Coontransoccidente, deben ampliar el número de frecuencias con las visitan las veredas, y de esta manera los usuarios no deban disponer solo del servicio de motocarro o mototaxis para desplazarse.

Dentro de los acuerdos se estableció que son tres puntos veredales los que no podrán visitar el transporte no oficial. Todo esto quedó firmado en un acta.

Descontento de los usuarios

Hay que tener en cuenta que los productores de café y agricultores han sido de los más afectados con la falta de transporte, pues según los usuarios, desde que inició la pandemia la empresa transportadora limitó sus servicios a solo fines de semana; por este motivo, les tocó recurrir al transporte ilegal y aún así tenían muchos inconvenientes.

“Aquí viene un motocarro cuando se le da la gana, los otros carros de Contransoccidente es lo mismo, pasan y si quieren nos recogen y sino no. Nosotros somos los que estamos llevando del bulto”, comentó José Pérez, caficultor residente en la vereda La Quinta.

En varias ocasiones José ha salido sobre las seis de la mañana con el fin de llevar el producto a la plaza y logra conseguir transporte hasta el mediodía o 2 de la tarde, lo que ha hecho que en muchas ocasiones deba devolverse con el producto completo o dejarlo fiado porque los compradores ya no cuentan con el dinero para adquirirlo.

A la queja se sumó Eduardo Olaya, agricultor de la vereda El Cural, quien expresó que desde que el transporte se redujo a solo los fines de semana, la gente empezó a usar el servicio ilegal, además porque los precios son más módicos. “Es mucho más cómodo pagar un mototaxi y no un expreso, por lo menos para movilizar un enfermo”.