En efecto, Hugo Salinas, alcalde de Anzoátegui, se refirió al asunto, en el que reconoció que ha afectado a los pobladores tanto del casco urbano como de la zona rural.

“Desde la bocatoma a la planta de tratamiento, en un punto de esta línea de conducción, se vino un derrumbe inmenso que se llevó la tubería”, explicó el mandatario.

Y agregó: “Llevamos 15 días colocando el agua en forma provisional, casi que artesanal, pero cada que llueve el derrumbe vuelve y se lleva la tubería”.

Asimismo, el burgomaestre reconoció el riesgo que asumen los operarios que se desplazan al lugar en procura de restablecer el servicio que llega a unas 700 familias en la zona urbana y a otras 1800 de las 12 veredas que componen el sector rural.

“Estamos racionando el agua en el municipio, tenemos unos tanques de abastecimiento inmensos y estamos dando el agua de forma racional para que la gente se abastezca y pueda utilizarla a media marcha”, aclaró el alcalde.

Una solución

Salinas manifestó que se han barajado algunas alternativas para una solución definitiva en este asunto. Así pues, explicó que está en procura de realizar unos estudios y diseños “a ver si logramos tener la posibilidad de hacer un viaducto para llevar las líneas de conducción del agua a la planta de tratamiento y a la zona rural del municipio (sin problemas). Eso implicaría que si la montaña se nos baja no vamos a tener esos inconvenientes”, dijo.

En la actualidad, de acuerdo con los tiempos que socializó, está en marcha la licitación para tales estudios y diseños que permitirán definir la hoja de ruta en materia de obra e inversión en este caso específico.

La intención es avanzar en este proceso cuando antes, toda vez que Salinas manifestó estar gestionando una cita en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo con la finalidad de obtener “una ‘manito’ del gobierno nacional y cuando tengamos esa cita en Bogotá esperamos ya contar con algo concreto y definido en esta iniciativa”, acotó.

Es de señalar que hace un mes, aproximadamente, el mandatario había expresado su preocupación a esta redacción debido a las dificultades por la inestabilidad en la zona de montaña y el difícil acceso al sector en el que va la línea de conducción que permite garantizar el preciado líquido a los pobladores.

Otros inconvenientes

De otra parte, las fuertes lluvias han incidido en la afectación de otros ámbitos en el municipio. Al parecer, recientemente colapsó un puente en la vía que comunica a Anzoátegui con Palomar por la inclemencia del clima, lo que instó a los pobladores a buscar alternativas.

“Ahí logramos junto con la comunidad hacer un puente artesanal con troncos y madera, y los carros pequeños pasan, pero cada que se crece el afluente que pasa por ahí se nos cae el puente y toca volverlo a hacer”, acotó Salinas.

En la misma medida, explicó que se han generado daños en algunas vías terciarias, lo que ha influido en inconvenientes para el transporte de los menores de edad a sus instituciones educativas.

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