Frente al hotel El Rey, cientos de personas de Melgar, el Tolima, Cundinamarca y el resto del país, se reunieron en una velatón como rechazo al crimen del pequeño de cinco años Gabriel Esteban, asesinado a manos de su padre en ese establecimiento.

El objetivo, aparte del rechazo a tan vil acto de violencia, fue hacerle honor al pequeñito, y en un segundo plano, apoyar al propietario del hotel que tuvo la mala suerte de recibir al “monstruo” que le arrebató la vida al niño inocente.

"Uno nunca espera que ataquen a los niños, ellos son nobles, no saben de maldad ni de los problemas de los mayores, nos sentimos muy tristes, no esperábamos estar de luto por esta tragedia", expresó Rosalba Rojas, habitante de Melgar, para la Radio Nacional de Colombia.

Los ciudadanos acudieron con bombas blancas, pañuelos, velas y flores, para decirle adiós a un alma que partió muy pronto, mientras exigían justicia pronta frente al caso. Además, se pidió a las autoridades mayor vigilancia en esta ciudad, a la que acuden miles de turistas.

"Todos los fines de semana en los establecimientos públicos con la Policía realizamos los controles que establece la ley, hemos cerrado las conocidas casas quintas, fincas que en muchas oportunidades las arriendan por días y no cumplen con las normas de seguridad, estos operativos de registro y control se fortalezcan para evitar nuevas tragedias", expresó Iván López, secretario de gobierno de Melgar, para el mismo medio.