Construcciones en los cerros de la comuna Seis estarían acabando con las fuentes hidrícas, la flora y la fauna de este punto de Ibagué.

Lo anterior quedó en evidencia tras un recorrido efectuado por EL NUEVO DÍA, acompañado de un experto en el tema ambiental que pidió reserva de su nombre.

Durante la visita, las  viviendas ubicadas  en zonas de alto riesgo, y en el pie de monte (punto donde nace una montaña) fueron el común denominador, especialmente en algunos sectores populares, como El Oasis y La Gaviota.

Allí varios inmuebles, que sin ningún tipo de autorización se edificaron, hoy se convierten en una 'bomba' de tiempo, ya que están ubicados en predios  inestables, y en época de invierno, el deslizamiento de terreno pone en peligro las viviendas y la vida de quienes las habitan.      

Sumado a ello, la falta de conservación de las rondas hídricas podrían ocasionar que a futuro, se afecte el suministro agua potable de unos 10 mil usuarios, que se surten de  acueductos comunitarios.
    
La visita
El deterioro ambiental en la comuna Seis es evidente; la parte alta de la montaña (La Gaviota) poco a poco fue ocupada por familias, que se asentaron allí. Caso similar al Oasis, donde inicialmente fue calificada como una invasión, pero hoy cuenta con todos los servicios públicos.

Aunque estos problemas no se presentan únicamente en las zonas vulnerables, pues en  El Vergel, conocedores de temas ambientales cuestionaron en su momento que, algunas construcciones no respetaron los 30 metros de aislamiento de la rondas hídricas.

“En el tema ambiental hay que hacer varias reflexiones; por ejemplo, los acueductos comunitarios presentan varios problemas. El primero es que no son tratados adecuadamente, convirtiéndose en muchos casos en focos de contaminación, porque las aguas no son bien tratadas.

“Y como en la partes alta de la montaña, se construyen viviendas sin ninguna planificación, sin servicios públicos, esas aguas residuales caen en las quebradas, que a su vez surten a esos acueductos que no son del Ibal. Pero, lo más grave es que se impacta la salud de los habitantes de los barrios populares; por eso es que los niños viven con problemas intestinales, porque el agua es contaminada”, explicó el experto.

Y agregó: “El otro problema es que las invasiones en los pie de montes,  se convierten en una amenaza, porque en la temporada invernal originan deslizamientos,  que afectan los bienes materiales e incluso la vida. Y es cuando al Gobierno le toca actuar para remediar esa situación, reubicándolos o haciendo millonarias obras, en lugar de tomar acciones preventivas”, puntualizó.

Una de las alternativas planteadas para evitar la erosión de los cerros, según se indicó es que en un trabajo conjunto entre la Alcaldía, Cortolima y el Instituto Geográfico Agustín Codazzi, IGAC, se ubiquen los propietarios de los  predios, ubicados en los cerros para prohibir las  parcelaciones irregulares, e ilegales. Ya que se presenta el denominado gota a gota de tierra, (cuando una persona accede a comprar un pedazo de tierra, sin tener instalados servicios públicos, pero tienen facilidades para pagarla).

La otra alternativa es que se adquieran los predios donde se ubican quebradas o nacimientos de agua, para evitar cualquier tipo de desarrollo urbanístico. ”La Alcaldía debe tomar medidas contundentes, administrativas y si es el caso pecuniarias, para evitar la parcelación y las invasiones, porque de lo contrario nos quedaremos sin agua, recursos naturales y no se evitarán los deslizamiento e inundaciones”, concluyó.