Oposición de veedurías al relleno sanitario La Miel

ARCHIVO - EL NUEVO DÍA
La posible construcción del vertedero de residuos sólidos de La Miel podría traer consecuencias graves para el medio ambiente, según dieron a conocer varias veedurías del Departamento, quienes se oponen a su apertura.

La Red de Veedurías del Tolima, Revisar, y la Mesa Protectora de Derechos Humanos mostraron inconformismo y desaprueban tajantemente la construcción del relleno sanitario La Miel, ya que, según lo argumentado, bajo esta zona se podría perder una extensa zona de aguas subterráneas.

En un documento enviado por la veedora Irania Hernández Romero, se explica los motivos por los que el acuífero debe ser preservado, pues en un futuro de ahí podría extraerse el líquido para la ciudad, además que si se crea el relleno sanitario en ese lugar, tres importantes cuencas resultarán contaminadas.


Señala, también, que es importante pensar en el futuro ecológico y ambiental y no tanto en la política e intereses económicos. Nombra también a AngloGold Ashanti en los intereses que tiene sobre Doima, pues dice, que la multinacional podría aprovechar el vital líquido para lavar el oro.


El documento señala que con la decisión tomada, se comprueba el desconocimiento sobre la gran amenaza antrópica de contaminación que pesa sobre las aguas subterráneas y la importancia como una alternativa definitiva a la problemática del servicio de acueducto de Ibagué.


“De acuerdo con nuestro conocimiento, reiteramos que debido a que el terreno que conforma la cuenca y el valle del río Cocora es geológicamente inestable, hay serias dudas de la garantía que pueda tener la durabilidad de las obras civiles en ejecución y por ejecutar para el acueducto alterno.

“En cuanto al manejo de la bocatoma del río Combeima y la quebrada Cay, depende de la información que salga de la consultoría adjudicada por Cortolima y que debe arrojar soluciones definitivas técnicamente en cuanto a obras”, reza el comunicado.
    
¿Perjuicios para la meseta?
Uno de los documentos con los que la red sustenta su malestar ante la construcción del relleno La Miel es un informe entregado por Ingeominas, en que se refleja la preocupación por conservar los recursos hídricos antes que crear un relleno sanitario.

Dicho informe, denominado ‘Análisis Preliminar para la Delimitación de Áreas Potenciales y la selección de Áreas favorables para la futura ubicación del Relleno Sanitario de Ibagué’, fue presentado ante la Administración municipal en 2002 por Ingeominas.  

“En el documento se recomienda que el relleno deba construirse fuera del abanico de Ibagué, más conocido como la meseta del Tolima, para no correr riesgos de contaminación de las aguas subterráneas del acuífero de Ibagué.

“Se recomendaba que las áreas con mas favorabilidad alta para la futura ubicación del relleno sanitario eran las ubicadas al sur y suroccidente del casco urbano, donde las aguas superficiales drenan hacia afuera del abanico de Ibagué”.

Dice también la carta que el alto estructural del acuífero genera dos subcuencas hídricas subterráneas que controlan el flujo de las aguas del acuífero con una dirección Oriente - Nororiente hacia Doima - Buenos Aires y Alvarado. La otra dirección de flujo es Sur - Suroriente hacia el Alto Combeima.

“Ingeominas explica que la formación de la cuenca del abanico de Ibagué fue el resultado de una actividad neotectónica, a partir de las fallas geológicas de Ibagué, Buenos Aires y Cucuana, teniendo como límite el borde del batolito de Ibagué, lo que nos indica que en cualquier momento se puede presentar un evento sísmico con epicentro sobre el abanico.


“Siendo base que los eventos naturales son impredecibles, uno de esta naturaleza afectaría el sistema constructivo del relleno La Miel, que podría causar una contaminación sobre el flujo de las aguas subterráneas del acuífero, lo que sería un daño hídrico, económico y social incalculable”, reza la carta.

Entre los daños contra la naturaleza está la contaminación del acuífero que afectaría la cuenca del río Opia, los manantiales, pozos subterráneos y aljibes localizados sobre la meseta de Ibagué, además contaminaría los ríos Alvarado, Chipalo, Opia y Combeima.
    
Recomendaciones de las ONG    
“Se necesita poner este tema en la agenda política de nuestra ciudad. Intentamos poner de presente la importancia que hay de cuidar el acuífero, como la solución más real que tenemos al problema del agua de la ciudad.

“La invitación se abre a la ciudadanía que habita y afronta la problemática día a día para que se haga escuchar su opinión; instamos a conocedores del tema con puntos de vista estructurados a los políticos a ver si el tema les llama la atención y hasta dónde lo manejan; creo que se piensa más en inmediatez en los votos o no han tenido tiempo de pensar sobre los temas de desarrollo de la ciudad y la región”, se indica en un boletín.

Y se sostiene que “si se tomara el acuífero como solución definitiva para el abastecimiento de agua en Ibagué, se miraría a largo plazo, pero tengamos en cuenta que tenemos años invirtiendo dinero y la problemática aún está latente. Si a este problema no se le mete agenda política, las consecuencias dentro de unos años van a ser nefastas”.

Características del acuífero
El acuífero de Ibagué tiene una extensión de 440 km2 y un espesor que oscila entre 200 y 300 metros, las zonas de recarga naturales de las aguas subterráneas son el flanco oriental de la cordillera central que rodea a Ibagué, las cuencas del Combeima y Opia, los drenajes superficiales de la meseta del Tolima, los canales de riego, los ríos Alvarado, Chípalo y quebrada Gualanday, estas aguas subterráneas son captadas por la Cuchilla de Gualanday.

El acuífero presenta una explotación de agua de 954 millones de metros cúbicos y reserva estática de agua de 900 millones de metros cúbicos.


El agua subterránea es un recurso natural renovable del que se dispone de forma inmediata en muchas áreas del país y del mundo, pero con el que no contamos por desconocimiento y es lo que está sucediendo con las aguas subterráneas del acuífero de Ibagué, su debido aprovechamiento puede ser una alternativa de solución definitiva del servicio de acueducto de la ciudad.


Defensa
Organizaciones como la ONG Red de Veedurías del Tolima, Revisar, y la Fundación Mesa Protectora de Derechos Humanos, Restiturigths, enarbolan la bandera de defensa del acuífero de Ibagué, por considerarlo el futuro en agua para la ciudad.

“Rechazamos la aceptación por parte de las autoridades locales del relleno sanitario regional y nos oponemos a la construcción del túnel propuesto en la doble calzada; por daño que se le podría causar a este tanque ecológico y que podría pasar de ser un acuífero captado a un acuífero filtrante”, se expone.

Credito
EL NUEVO DÍA

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