Angustiados, así se encuentran los habitantes del barrio Jordán Séptima etapa, pues la inseguridad y delincuencia se han venido apoderando de las calles del sector, situación que atemoriza a la comunidad.

Según expresan los vecinos, el parque del Jordán séptima etapa y la avenida Guabinal, se convirtieron en un foco de delincuencia y consumo de alucinógenos, a tal punto que persona que transite por este lugar se expone a ser atracada.

Ante los constantes robos y la reunión de drogadictos, la comunidad exige mayor presencia de la Policía, pues según afirman, el lugar permanece solitario y a oscuras, condiciones aprovechadas por los ladrones para hurtar las pertenencias de las personas que a diario deben movilizarse por allí.

Pero las víctimas no son solo transeúntes desprevenidos, pues los pasajeros de transporte público, busetas principalmente, también han resultado afectados.

Este hecho ha tenido lugar cuando las busetas esperan el cambio de semáforo, momento aprovechado por los delincuentes para acercarse y ‘raponar’ los celulares de las personas que llevan las ventanas abiertas.

Según las denuncias, las viviendas también son ‘presa’ fácil de la delincuencia que azota la zona, pues en varias casas los ladrones han intentado ingresar por los tejados; sin embargo, han sido sorprendidos por los vecinos, lo cual ha impedido que logren su cometido. También denuncian un caso en que una mujer de edad avanzada fue escopolaminada.

Otro de los métodos utilizados por los delincuentes es atracar movilizándose en moto, para lo cual utilizan mujeres, quienes se encargan de realizar el atraco. Según la comunidad, algo que se está volviendo cotidiano en el Jordán, pues algunos de ellos han sido víctimas de esta modalidad de hurto.

Microtráfico

Esta es una de las situaciones que más inquieta y atemoriza la comunidad, pues de acuerdo con sus relatos, han visto a una persona que llega al parque de la Séptima etapa a vender estupefacientes, situación que amenaza a la comunidad estudiantil del colegio Celmira Huertas que queda próximo al sitio en mención.

“Es frecuente ver numerosos grupos de muchachos que se reúnen en el lugar, donde llega este señor. Él es un hombre calvo de aproximadamente 40 años, reconocido por vender droga en el Jordán, Bosque Largo y detrás del Colegio La Sagrada Familia, dura más o menos una hora y en el día pasa dos o tres veces”.

El barrio La Campiña también resulta afectado por la delincuencia.