En el documento el Personero Isaac Vargas, sustenta que los hechos que motivaron la acción de tutela se basan en el incremento de la población Embera desde el 2010, sin tener acciones fructuosas para brindar garantías a dicha comunidad, donde los niños son los principales vulnerados en sus derechos constitucionales.

Entre las pretensiones se asegura que los derechos de los niños prevalecen sobre los derechos de los demás, y piden que se les ordene a las entidades ya mencionadas, accionar en especial a la Administración municipal, ya que textualmente expresan que “su respuesta se muestra evasiva e inocua”.

Darío Rodríguez, personero delegado en derechos humanos, manifiesta que “me da tristeza que la Alcaldía es la entidad que menos presta atención, ni busca aunar esfuerzos y disponer de recursos para atender esta comunidad, la cual creemos que poco les interesa”.

Rodríguez asevera que se había solicitado una caracterización, con el fin de determinar cuántos indígenas pertenecientes a las comunidades Embera Catío y Chamí, hay en Ibagué, pero la alcaldía no brindó los medios necesarios para adelantar el censo.

La tutela que fue radicada el 17 de abril, y que tiene una duración de 10 días hábiles para que el Tribunal Superior tenga un fallo, podría ser el medio para que finalicen las evasivas que dice la Personería han tenido los entes asociados a la problemática y de esta manera se responsabilicen para que no se quede su labor en actas y reuniones.