Después de las airadas críticas de diversos sectores políticos y de la opinión pública por el cambio de estatutos del Ibal que aprobó la Junta Directiva y la Asamblea de socios el pasado mes de marzo, el gerente del Ibal, Carlos José Corral Albarello, anunció ayer que la modificación del objeto social no se inscribirá en las escrituras, lo cual dejaría sin efectos la decisión de pasar de Sociedad Anónima a Acciones Simplificadas y que permitiría la inclusión de privados a la empresa de acueducto y alcantarillado de Ibagué.

De acuerdo con Corral, la modificación presentada y puesta a consideración por el secretario General del Ibal, Ricardo Arroyo, a los socios, terminó siendo ambigua e inaplicable.

“La ambigüedad está en que se genera una discusión si la empresa es anónima o por acciones y resulta que es exactamente igual, entonces uno no puede transformar una empresa por acciones cuando la empresa ya existía por acciones. Acá definitivamente hubo un intento de discusión que termina en una ambigüedad e imprecisión que no permite aplicarla”, manifestó el funcionario.

Además, añadió “el Ibal sigue siendo la misma sociedad anónima, teniendo la misma composición accionaria, acá no hubo ningún cambio”.

No obstante, no deja de ser cuestionable qué interés tenía la Junta y Asamblea de socios en modificar el objeto social de la empresa si no se pretendiera fomentar las asociaciones público privadas o la señalada ‘privatización’ que preveía dejar en su mandato Luis H.

“Sería un absurdo que nosotros que hemos trabajado tanto para que la empresa no la intervengan, para que no se vaya a quebrar y darle una fortaleza operativa y técnica que considero que está en un esquema que es acertado, vaya a tener un cambio que no es lo coherente y más a estas alturas de la administración”, anotó el Gerente del Ibal.

Aclaró además que “ni en la discusión ni en el documento (acta de socios) hay admisión de acciones para vender, no hay ninguna acción de privatización, no hay ninguna acción de quitarle esa fortaleza que le hemos dado a lo largo de los últimos 13 años a la empresa”, especificó Corral.

Sin embargo, reconoció que desde su llegada al instituto era un hecho la necesidad de revisar y de modificar los estatutos con los respectivos estudios.

En el acta del pasado 24 de marzo, Luis H. había pedido al secretario General del Ibal, Ricardo Arroyo, efectuar los estudios pertinentes y contar con el concepto de todos los jurídicos de la Administración para dar seguridad al tema.

Pero con respecto al mismo Corral no dio respuesta concreta. “La secretaría General presentó los argumentos del caso, ya que es el alma jurídica de la empresa”.

Gerente se debe a las decisiones de la Junta

Aunque el gerente del Ibal, Carlos José Corral afirmó que con la decisión tomada el pasado 24 y 26 de marzo en reunión con accionistas y el mismo alcalde Luis H. sobre la modificación del objeto social del Ibal “no pasa nada”, pues el proceso no ha surtido efecto en las escrituras y no se va a llevar a cabo, queda la duda sobre los alcances de las declaraciones del Directivo, ya que su labor está supeditada a las decisiones de la Junta Directiva y la Asamblea de Socios que dieron el sí a la modificación y que no se han pronunciado al respecto.

“Este es un proceso que es inaplicable, ambiguo e improcedente, en total, un saludo a la bandera”, señaló Corral.

EL NUEVO DÍA dialogó con el gerente de Infibagué, Jairo Robayo, que posee más de 90 por ciento de acciones al interior del Ibal y que reafirmó su compromiso con la modificación de estatutos.

Según Robayo “nunca se ha pretendido cambiar de sociedad por acciones ya que el objeto de la reforma es que el Ibal se pueda asociar con otras empresas para prestar el servicio, pero nunca se ha abierto la puerta a la privatización porque no ha habido autorización para negociar las acciones de cada uno de los socios”, puntualizó.

Aunque Robayo agrega estar de acuerdo con la medida porque permitiría a la empresa aumentar su capital, explicó que aunque no es necesario que los socios sean convocados para determinar si es adoptada o no el acta que conllevó a la modificación de los mismos, aseveró que si existen dudas se deberá convocar una asamblea extraordinaria.

No obstante recalcó, “si el acta no está aprobada y no se han hecho los cambios en la escritura ni el registro en Cámara de Comercio, la misma no tendría validez, así haya sido aprobada por la Asamblea. Cuando se eleve con escritura pública y se radique en Cámara y Comercio sí”, puntualizó Robayo.

Preguntas y respuestas

EL NUEVO DÍA: Ingeniero Carlos José Corral el cambio de estatutos va a surtir modificaciones en las escrituras de la empresa...

CJC: No ninguna. No hay nada que aplicarle a las escrituras del Ibal. La ambigüedad está en que se genera una discusión si la empresa es anónima o por acciones y resulta que es exactamente igual, entonces uno no puede transformar una empresa por acciones cuando la empresa ya existía por acciones.

¿Por qué en marzo sí era posible este cambio de estatutos y después de que se dio a conocer la posible privatización dice usted que no se puede?

CJC: Acá hay una ambigüedad y termina siendo objeto de una discusión alrededor de un medio político, pero al final no hay nada. Es una discusión que termina siendo inoperante e inaplicable.

END: En términos concretos, habrá inclusión de capital privado al Ibal...

CJC: Rotundamente no. Los estatutos no lo permiten.

END: ¿Qué pasa entonces con el proceso que llevó a cabo el secretario General, Ricardo Arroyo, se invalida?

CJC: Nada, porque es ambiguo e inoperante.

END: Continúa el Ibal siendo como sociedad anónima de carácter estatal...

CJC: Sigue siendo la Sociedad Anónima que se constituyó hace 17 años, los accionistas siguen siendo los mismos, la composición accionaria sigue siendo la misma, aquí no hubo ningún cambio.

END: Desaprueba usted la gestión de Arroyo frente al cambio de estatutos...

CJC: Confío en que el doctor Arroyo dispuso de su mejor capacidad, de su buena fe en tratar de hacer unas modificaciones, pero terminó siendo una discusión ambigua e imprecisa.

END: Habrá la apertura de un proceso disciplinario en contra de Arroyo...

CJC: No hemos revisado ese tipo de especulaciones.

END: Se ha vuelto a reunir la Asamblea de Socios para tratar el tema de cambio de los estatutos

CJC: No. La última reunión fue el 26 de marzo.

END: ¿Cómo se puede echar para atrás una decisión aprobada por la Junta Directiva y la Asamblea de Socios si usted se debe a las decisiones de las mismas?

CJC: Básicamente porque no se ha hecho ningún registro, no se ha hecho ninguna acción con ello y si revisa el texto tiene ambigüedades, imprecisión y es inaplicable.

END: Creería usted que al reversar la decisión se abriría la posibilidad a que pueda ser objeto de acciones disciplinarias por pretender afectar los intereses de la empresa

CJC: Lo dejaré en manos de los entes de control esa revisión. Y repito no se ha registrado, ni se ha escriturado ni se hará.