Panóptico: de un Bien Cultural a ‘olla’ de consumidores de alucinógenos

EL NUEVO DÍA
Así como se ha vuelto común la desidia administrativa en torno al Panóptico, ya es un escenario habitual ver consumidores de sustancias alucinógenas que llegan cada tarde a la antigua cárcel.

Habitantes del sector aseguran, sin excepción, que el lugar se ha convertido en un reducto de consumidores, que ven en el abandonado Bien de Interés Cultural de la ciudad el espacio ideal para consumir toda clase de drogas.

En entorno no es el mejor, la semana anterior se prendió la alarma, pues se cumplió el pronóstico que han hecho decenas de personas que viven en los barrios aledaños. Un joven fue apuñalado bajo la mirada indiferente de personas que no lo ayudaron, entre otras cosas, porque entrometerse en esos problemas es un asunto que no los atañe.

Muy cerca de allí, el Skate Plaza ha sufrido toda clase de críticas debido a que los jóvenes allí aprovechan para consumir drogas al espacio libre y sin recato con la comunidad y los transeúntes.

Pareciera que en el tema del consumo se estableciera un circuito en el centro que involucra el parque Centenario, el Skate y también el Panóptico, calificado como un ‘elefante blanco’ e ingratamente recordado en una producción televisiva nacional como el ‘cagadero de palomas’ de la ciudad.

Sin armonía

Las Juntas de Acción Comunal intentan sobrellevar un equilibrio para que permanezca la armonía en toda la zona.

Habitantes de barrios como Centenario, Belén, Pueblo Nuevo, Malavar y 20 de Julio han manifestado su inconformidad a través de sus líderes comunales, pues cuando intentan pasar una tarde en el lugar, no soportan el fuerte olor a marihuana, más la inseguridad y la violencia de la que han sido testigos.

El Panóptico posee amplias zonas verdes, lo que ha generado la visita de sujetos que se acercan a este lugar a consumir sustancias psicoactivas y, en otras ocasiones, ha sido espacio para que algunas personas sean víctimas de robos.

Al lugar asisten jóvenes universitarios, niños de colegios e indigentes, así como adultos que llegan a meterse un ‘porro’.

Según una presidente de Junta de Acción Comunal, quien prefirió no revelar su nombre, “el lugar se ha vuelto muy peligroso, necesitamos policías alrededor, se han visto viciosos y, no solo eso, llega mucho niño del colegio Germán Pardo a jugar y no pueden porque les da miedo estar con tanto indigente, porque algunos se vuelven agresivos cuando están fumando”.

Cuando se trata de inseguridad, la comunidad se manifiesta. Una de las razones es el daño y el perjuicio que se comente contra de la integridad de los habitantes del sector.

Leonardo Guayara, miembro de la comunidad, dice que “lo que iba a ser algo bueno para la ciudad, se convirtió en un foco de gente que viene a fumar, nos da nervios cruzar el sector, este lugar no tiene ningún sentido para la ciudad”.

Ahora bien, una trabajadora de un local aledaño afirma que la seguridad privada hace su trabajo, pero a las plazas del Panóptico llega un gran número de consumidores que no pueden controlar e incluso amenazan al personal de vigilancia.

“Hay muchas peleas, niños del colegio Germán Pardo se agarran ahí. Si usted quiere que lo atraquen, hay que venir después de las 6 de la tarde. Uno inhala la marihuana las veces que quiera, he visto algunos niños con uniforme que vienen a consumir”, sostiene la mujer.

Esta redacción se comunicó con el secretario de Gobierno, Camilo González Pacheco, quien indicó al respecto que están enterados de la inseguridad que ha surgido en el Panóptico, por eso anuncia que los controles se van a intensificar.

“Con el Coronel de la Policía vamos a implementar un mayor control, siempre con el cuadrante y con operativos periódicos de tres horas que han tenido presencia allá, vamos a intensificar y darle el sentido cultural que debe tener”.

González Pacheco agregó que se hace necesaria una medida más fuerte con tal de controlar la presencia de los consumidores, así como conseguir un espacio que no sea ocupado por la informalidad, sino que sea un lugar propicio para las expresiones artísticas.

Cultura y no violencia

La intervención ha sufrido varios tropiezos, entre ellos las demoras en la entrega de los trabajos exteriores.

El pasado viernes en la mañana, asesores de la Secretaría de Cultura junto al ingeniero Hugo Ferro, contratista de la obra, hicieron la inspección en la infraestructura. Luego de la revisión, se evidenció el deterioro en algunas zonas como los adoquines y las piezas de madera de uno de los salones.

El concejal William Rosas sostiene que desde el Gobierno nacional están esperando que las investigaciones arrojen resultados, ya que la inversión millonaria que se destinó al Panóptico no se ha materializado.

“Recientemente vino a la ciudad la Ministra de Cultura y aseveró que debe haber resultados, para canalizar recursos y finalizar el Panóptico, pues ese lugar se quiere convertir en un museo. Va a ser una apuesta al tema del posacuerdo, además tiene una inversión como lugar turístico y sería bastante atractivo que se sume al corredor musical y que sea un atractivo cultural”, añadió Rosas.

Por otra parte, el presidente del Concejo, Camilo Delgado, explica que hay una serie de programas orientados a reconocer los bienes culturales del municipio, así como ejecutar inversiones y poner en marcha los esfuerzos para que sea abierto al público.

“Una vez sean recibidas las obras, porque no han sido recibidas por la Administración, habrá que evaluar el cumplimiento de las mismas, evaluar las inversiones pendientes para la recuperación de la parte antigua del Panóptico, no de las estructuras nuevas que lastimosamente oculta el patrimonio cultural que está inmerso en esa infraestructura que allí está construida y entrar a determinar cuál va a ser el aporte del Municipio con la financiación de la Nación y pueda tener por fin un tipo de funcionamiento y utilidad pública”, indicó Delgado.

Credito
EL NUEVO DÍA

Comentarios