Las obras iniciaron en 2012, sin embargo se detuvieron un año después dado que era responsabilidad de la Administración adecuar y habilitar el paso peatonal, pues en el convenio que firmó la Alcaldía con la concesionaria San Rafael quedó claro que el objeto del acuerdo era solo por la construcción del puente.

Según explicó Sandra Milena Rubio, secretaria de Infraestructura, durante la intervención llevada a cabo durante este año se presentaron imprevistos como las condiciones climáticas de los primeros meses del año y obras complementarias que aplazaban cada vez más la apertura de la obra.

“El puente como tal tenía el paso peatonal pero posterior a esto las obras como andenes y senderos peatonales no estaban diseñadas, toda obra tiene imprevistos”, dijo.

Aunque la Alcaldía tenía prevista una inversión de 254 millones de pesos, el costo disminuyó a 70 millones de pesos ya que tuvo el aporte del Comité de Cafeteros y la concesionaria San Rafael.

En los trabajos se tuvo en cuenta la demarcación de los bicicarriles que se han venido implementando en algunas avenidas de la ciudad. El alcalde Guillermo Alfonso Jaramillo ha dicho que dentro del Plan de Desarrollo está contemplada la adecuación de 27 kilómetros de ruta para que los ciclistas transiten sin ningún peligro.