Aunque están de acuerdo con la intervención de la carrera Cuarta A entre calles 20 y 21, no ven conveniente instalar bancas y ampliar los senderos peatonales de la calle 21 entre carreras Cuarta y Quinta, porque, según ellos, causaría problemas de congestión vehicular y una disminución en el número de compradores.

“Nos van a afectar en un 100 por ciento, porque no van a dejar vías de acceso por ningún lado, entonces cómo van a entrar los vehículos y la gente se va a desplazar a otros puntos. Tampoco nos van a dejar zonas de descargue, sabiendo que aquí llegan a vender y comprar personas de diferentes municipios y departamentos”, afirmó Mora.

Los vendedores inconformes solicitan que no se amplíen los andenes y se mantenga el descargue en el sector hasta tanto se construya un centro de acopio, obra que sería “una verdadera solución”. Además, alegan que van a exigir certificado de uso de suelo como “estrategia para desplazarlos”.

Las obras de remodelación tienen un valor estimado de $833 millones y tienen como propósito la recuperación integral de los alrededores de la plaza con siembra de especies arbóreas, instalación de bancas y puntos ecológicos, y ampliación de andenes de 4 a 10 metros.