La caída de un muro en construcción del cementerio San Bonifacio, hace un mes, sobre una vivienda del barrio Primero de mayo que colinda con el camposanto, puso en evidencia las adecuaciones que se hacen al interior de este recinto, sin que de forma clara se establezcan los permisos para tal obra.

EL NUEVO DÍA pudo constatar que en el lugar se adelanta la construcción de un muro para separar alrededor de 23 viviendas del cementerio y se están haciendo ajustes para implementar más osarios en el lugar.

No obstante, en este predio que es del Municipio pero que administra en comodato la Iglesia Católica a través de la Pastoral Social, dichas intervenciones están prohibidas según el decreto municipal 1000-0823 del 2014 que adopta la revisión y ajuste del Plan de Ordenamiento Territorial (POT).

En el artículo 67 del POT se estableció que: “a partir de la entrada en vigencia del presente decreto, no se podrán ampliar, modificar, construir o adecuar el área de los cementerios urbanos existentes”, situación que no se estaría respetando y que, pese a las denuncias de la comunidad, sigue en marcha. 

El artículo en mención, incluso decreta que la Administración municipal deberá en corto plazo realizar los estudios específicos para determinar la futura localización de los cementerios que solo podrá ser en zona rural situación que tampoco se ha cumplido. 

Al respecto, Andrés Farah, director de información y aplicación de la norma urbanística de la Secretaría de Planeación señaló que la cartera se ciñe con la información del POT y la resolución 1447 del 2009 emitida por el Gobierno nacional y que este tipo de obras no pueden tener una autorización desde la Secretaría. 

“No se podrá ampliar, modificar, construir, ni adecuar en el área de cementerios urbanos existentes, quedan automáticamente congelados para ampliaciones que se deban hacer en su momento. 

Nosotros como Planeación nos regimos por la norma y Planeación no da permisos de construcción, ni de ampliación ni de ninguna clase, menos cuando el artículo 67 lo dice claramente. 

Ese tipo de obras no son autorizadas por nosotros, se tendría que ver con el ente que hace verificación de las actividades urbanísticas en este caso la Secretaría de Gobierno o los inspectores urbanos, porque tal vez se les dio un permiso, pero desde la Alcaldía, exactamente desde la Dirección de Información y Aplicación de la Norma urbanística, nosotros nos remitimos al POT y a la resolución nacional”, reseñó Farah. 

Piden intervención

A raíz de la caída del muro, la Junta de Acción Comunal del barrio Primero de mayo instauró una querella ante la Comisaría Once de Policía para solicitar que se haga la demolición, suspensión y respectiva sanción por la construcción del muro que señalan los perjudica y pone en riesgo su seguridad.

En el mismo documento radicado el pasado 6 de agosto, además se le pide a la Comisaría de Policía verificar si para dicha adecuación existe una licencia de construcción expedida por la autoridad competente y si se están implementando los parámetros de seguridad y salud en el trabajo. 

“Solicitamos que se actúe de manera pronta para evitar más accidentes y que no se  vayan a perder enseres, sino vidas”, señaló en un documento Martha Yolanda Rojas, presidenta de la JAC.

Rojas señaló que los muros en construcción no tienen la estabilidad necesaria, por lo que temen que un fuerte viento o incluso un temblor termine generando una tragedia mayor, asimismo, acotó que pese a que se ha intentado entablar diálogos con la administración del cementerio la comunicación ha sido nula.

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