Apagadas y hasta tenebrosas, así podrían definirse las noches de la ‘ciudad de mil y una columnas’, como es conocida Ambalema.

Allí las luminarias que dan vida a las principales calles de este municipio no cumplen su función, y mientras esto sucede, sus habitantes deben cumplir con el pago de alumbrado público.

La situación, que ya había sido expuesta por el alcalde Hernán Bustos Abril, toma más fuerza cuando el personero de dicho municipio, Yeyson Quintero, afirma que entre el Municipio y Enertolima se tiran la ‘pelota’ de la responsabilidad.

Y afirmó que en reunión con Enertolima se evidenció que en la actualidad hay 741 luminarias, de las cuales 451 son de mercurio 125, es decir, que generan un mayor consumo de energía frente a las utilizadas para el alumbrado público.

Por ello explicó, además, que estas son contrarias a la normatividad de protección ambiental como expusieron diferentes entes de control.

Vínculo Estado - empresa privada

Es de recordar que Ambalema tiene un convenio con Enertolima desde 2005, en el que al parecer, la empresa debería hacer el arreglo, pero este no se está ejecutando, ya que en actualidad menos del 30 por ciento sirve.

Por tal motivo, el Alcalde de esta población estaría pensando en aumentar el costo del servicio, para poder hacer el mantenimiento.

Situación que, según expresó Quintero, sería atentar contra la comunidad, debido a que está cumpliendo con los pagos.

“El Municipio adeuda más 41 millones de pesos a Enertolima, y a la tesorería de la Alcaldía ingresa un promedio mensual superior a los cuatro millones de pesos por el pago del impuesto de alumbrado público por Pajonales”, afirmó el Personero.

De esta situación, según señaló el representante del Ministerio Público, se indagará para saber la destinación de estos dineros.

Además que los mayores deudores ante la empresa de energía son la Alcaldía, la Empresa de Servicios Públicos y el Hospital.

El planteamiento del Personero

Los hechos, según Quintero, llevan a exponer una serie de soluciones para encontrar una solución a la oscuridad del municipio y que esta no sea el aumento del cobro.

“Se deberá hacer un censo desde las 6 de la tarde con Enertolima para revisar cuáles son las luminarias que sirven y las que están obsoletas”, afirmó el Personero.

Y añadió que es necesario que las entidades morosas del Estado busquen la manera de refinanciar con Enertolima, además, que se desarrolle un programa de recuperación de cartera.