Este registro se dio como medida de mitigación por los desastres que allí se ocasionaron con el proceso minero. Durante el recorrido se logró verificar el avance en la ejecución de las obras de reforestación y restauración geomorfológica de los suelos.

¿De qué se trata?

Allí estas labores de siembra de más de cuatro mil árboles de las especies acacia mangium, guadua y yopo, están siendo desarrolladas por una Asociación de Mujeres del municipio, denominada Paz Ambiental, Atambipaz.

Esta alianza que trabaja desde hace cuatro años se dedica a la recuperación de las cuencas hídricas, reforestación, manejo de residuos sólidos y reciclaje.

“Con nuestro trabajo generamos consciencia del daño que están haciendo y todo el esfuerzo que hay que hacer para volver a empezar y que esos terrenos sean recuperados, es hora de que la gente sepa que con la mina solo hay destrucción”, afirmó Sandra Liliana Aroca Culma, presidenta de la Asociación.

Hasta el momento, los predios intervenidos son Aponesito, en la vereda Apone, y Las Vegas, de la vereda Anape; próximamente se iniciará trabajos de restauración y reconformación del suelo en el predio Parasales, de la vereda Apone.

Por su parte, el director de Cortolima, Jorge Enrique Cardoso, dijo estar satisfecho no sólo por los avances de esta obra, que generará importantes beneficios para la comunidad, sino, también, por el apoyo y aportes de maquinaria y operarios que han prestado la Gobernación y la Alcaldía de Ataco.

“Gracias a esta contribución, se da cumplimiento al fallo del Tribunal Administrativo del Tolima, por lo que se está haciendo restauración, recuperación y rehabilitación de ecosistemas en la cuenca del río Saldaña.

“Es de recordar que estos sectores resultaron gravemente afectados por acciones inconscientes de la minería ilegal”, puntualizó.