“Las presiones antrópicas por cuenta de proyectos de viviendas, asentamientos e invasiones son las principales amenazas que generan los seres humanos a la permanencia y vida del bosque de Mariquita y de la reserva, declarada así por el Ministerio de Agricultura, mediante la Resolución No 1240 de diciembre 19 de 1960, con el objetivo de conservar el territorio y sus especies”, complementó Jorge Enrique Montealegre, funcionario de Cortolima.

Dentro de las primeras acciones tomadas para salvar esta reserva forestal está retirar la reserva a un lugar de aislamiento perimetral de 15 mil 500 metros lineales, actividades que hacen parte de la implementación del plan de manejo presentado al Ministerio de Ambiente.

Para lograr el 100 por ciento del aislamiento se requiere del compromiso de la Administración municipal y de las comunidades asentadas, por lo que se está desarrollando la socialización del ‘Plan de Manejo’ y, de esta manera, cumplir con la primera fase, el cercado de ocho mil 900 metros lineales.

En el encuentro participaron funcionarios de Cortolima, de la Alcaldía de Mariquita, la comunidad asentada en la reserva forestal protectora de las quebradas El Peñón y San Juan, y las organizaciones Oasis de Vida y Desafío Nuevas Propuestas.