Esta iniciativa, viene acompañada de la creación del mismo número de viveros comunitarios, en los que se integrará a jóvenes campesinos e indígenas, para generar un proceso de reforestación en dichos lugares.

“La idea es sembrar árboles nativos, frutales y pasturas, ya que consideramos que esto ayuda a tener una ganadería bovina y ovina responsable y amigable con el medio ambiente”, explicó el mandatario.

Las veredas en las que se ejecutará este proyecto son La Palmita, ubicada en límites con el Huila; Santa Bárbara, una de las áreas más golpeadas por ‘El Niño’; Pueblo Nuevo, ubicado en la ruta del Desierto de la Tatacoa; el centro poblado Velú, lugar en el que también se busca realizar obras en el acueducto.

Asimismo se incluyó Mercadillo, Tinajas, y el área entre Yabi y Pocharco, en donde actualmente se realiza un proyecto del Pnud sobre la preservación de bosques secos.

En cuanto a los recursos que se necesitan “nosotros hemos dejado para los estudios una parte de recursos de regalías, también, vamos a salir a gestionarlos con Cortolima y también ante el Gobierno nacional”, expresó el burgomaestre.

Pero ya se tiene un adelanto, porque el Ministerio de Agricultura y el Ejército Nacional, entregaron los dineros para la construcción del que se ubicará en Pueblo Nuevo.

“Aunque los pozos profundos no son la solución definitiva para la problemática ambiental que vive el Municipio, es la oportunidad de contribuir a la siembra de casi un millón de árboles que tenemos como reto”, concluyó el Alcalde.