El gobernador del Tolima, Óscar Barreto, le salió al paso al reciente cuestionamiento hecho por el director del Departamento Nacional de Planeación, Simón Gaviria, en el que señaló que el Tolima tiene una “débil capacidad de estructuración” de proyectos para ser financiados por regalías.

En percepción del Mandatario seccional, la crítica solo busca desviar la atención de la problemática de fondo que tiene la Nación y que reduce cada vez más el acceso de las regiones a estos recursos.

“Al Gobierno nacional le falta sincerarse un poco, porque debería decir que tiene un hueco fiscal de 34 billones y por eso el afán de la reforma tributaria y que no tienen un peso”, expresó Barreto.

El Mandatario también recordó que el Tolima cuenta con proyectos estructurados y viabilizados por un valor que supera los $300 mil millones, pero por falta de recursos están en el papel.

Recursos propios equivaldría a viabilidad

El gobernador Barreto trajo a colación un caso específico para explicar por qué se demora la entrega de viabilidad a los proyectos en los municipios.

“Hace unos días estaba revisando una propuesta que el alcalde de San Antonio (José Dayler Lasso) presentó al Contrato Plan, para modernizar el hospital y no se lo viabilizaban.

“Entonces le dije a Olga Lucía (Secretaría de Planeación) que llamara a Bogotá y preguntara qué pasa con el proyecto, que yo como Gobernador estoy dispuesto a colocar el ciento por ciento de los recursos y sabe qué contestaron, yo lo escuché, si el Gobernador pone la plata se lo viabilizamos ya”, contó el mandatario.

Y precisamente San Antonio, es una de las poblaciones que está categorizada por el DNP junto a Murillo, Valle de San Juan, San Luis, Prado y Planadas, como en estado crítico, calificación argumentada en la falta de capacidad de estructurar iniciativas de desarrollo social y económico.

“Vienen aquí a pontificar y a echarle la culpa a los demás, creo que falta franqueza, si no tienen plata, pues que digan que no tienen plata, pero que la ineficiencia del Gobierno nacional no se la vengan a trasladar a los alcaldes, ni a mí”, expresó el Gobernador.

Añadió que las excusas y ‘trabas’ para obtener la viabilidad en los proyectos, se convirtió en una “tomadera de pelo”, ya que se está trasladando a los mandatarios territoriales y regionales responsabilidades que son directamente del Gobierno nacional.

Manejo de regalías, fortalecen el centralismo

Desde hace cuatro años, municipios y regiones, tuvieron que pasar de manejar directamente el dinero de las regalías, a postular proyectos para acceder a ellas.

Lo que más tiene molesto a los mandatarios es que no es fácil obtener el visto bueno del Gobierno nacional, aparte de ello, cada propuesta conlleva inversión de tiempo y gestión.

Por ello, la fuerte crítica del gobernador Barreto va orientada a que no es coherente que, si el dinero es de las regiones, se tiene que surtir un largo proceso y además agradecer por recibir el visto bueno para iniciar la ejecución.

“La realidad es esa, es la plata de los tolimenses y de los colombianos, entonces este país debe hacer un reconocimiento al excesivo centralismo, imagínese ahora tenemos que darle gracias al Gobierno nacional para que nos autorice un proyecto con la plata de nosotros, ese es el país que tenemos, la Colombia que tenemos”.