Buscar estrategias para mantener una oferta y demanda de estudiantes en la Universidad del Tolima, es una de las recomendaciones específicas de la Universidad del Valle, ya que los avances del estudio contratado muestra que hay un sobrecosto en la nómina de personal, cercano a los $89 mil millones.

Sobrecarga, que según Jasbleidy Rondón, representante de la Univalle, comenzó con la reforma administrativa que se hizo en 2012, año en el que la entidad tenía matriculados 40 mil estudiantes.

“Ya en 2017 bajó a 18 mil estudiantes, por lo tanto ya no existen transferencias, ya no existen dineros con qué sostener la Universidad, pero (se mantiene) la misma carga de funcionamiento”, explicó Rondón.

En cuanto al diagnóstico de la situación real de la alma máter, el objetivo es entregarlo a más tardar en mayo, mientras tanto se procederá a seguir aplicando paulatinamente, medidas de alivio.

Sobre los recientes cambios hechos, “inicialmente hay un ahorro alrededor de $3 mil millones. Los cargos de carrera, provisionales, trabajadores oficiales, no se van a tocar.

“Acá estamos hablando de una reforma académico - administrativa, no solo de la persona”, precisó Rondón.

Agregó que se está analizando cómo son los programas y horas cátedras, también se está evaluando si se está cumpliendo con el mínimo requerido, ya que existiría un caso en el que hay programas con un solo estudiante.

Rondón aclaró que el hecho de evidenciar las debilidades que tiene la UT, no significa que se van a suprimir cargos o retirar personas.

“La Universidad del Valle como entidad pública y como hermana y doliente, que defiende lo público, busca que la UT se fortalezca. El resultado nos puede sugerir crear más puestos, pero hay que buscar estrategias para que la Universidad también tenga una oferta y demanda por los estudiantes”, precisó la representantes de Univalle.

Es decir que lo clave es lograr una reorganización y establecer en qué se está gastando el dinero y fortalecer la oferta, para que los estudiantes lleguen.

“Lo ideal es que dentro del diagnóstico final que presente la Universidad del Valle, ojalá se tomen decisiones y no son solo de retiro de personal, sino decisiones administrativas para que esto funcione, o sino este diagnóstico puede quedar colgado”, concluyó Rondón.