“A la fecha me siento abandonado por el Estado”: Personero de Falan

SUMINISTRADA - EL NUEVO DÍA
La preocupación acompaña diariamente al personero de esta población ubicada al norte del Tolima, por una serie de amenazas recibidas en el último año. Aunque ya hizo denuncias, a hoy se desconoce quiénes son los autores de las intimidaciones que surgieron de su trabajo como representante del Ministerio Público.

Desde hace aproximadamente un año, el personero de Falan, Adixon Ernesto Lerma Galindo, es víctima de una serie de intimidaciones en contra de su vida y a pesar de que su caso está bajo el conocimiento de la Unidad Nacional de Protección, UNP, al igual que de las autoridades hasta el momento se desconoce el origen.

La más reciente advertencia la recibió a través del párroco del pueblo, por medio de una hoja escrita de manera digital, en la que se le ‘encomienda’ al representante de la iglesia Católica “ofrecer una misa durante ocho días en el horario en donde más comunidad asista, por el alma del señor personero”.

EL NUEVO DÍA: ¿Cuándo empezó su trabajo como representante del Ministerio Público?

ADIXON ERNESTO LERMA GALINDO: El primero de marzo de 2016.

E.N.D: ¿Cuál es la situación que quiere denunciar?

A.E.L.G: Quiero poner en conocimiento de la opinión pública que he venido presentando amenazas desde hace más de un año.

Inicialmente, lo tomé por unos predios que han querido ocupar personas utilizando documentos falsos, han falsificado firmas de fiscales, (al igual que) documentos de la SAE (Sociedad de Activos Especiales), que es la sociedad que administra los bienes que están en comiso.

También, han querido falsificar documentos de la Fiscalía de Mariquita y de la Estación, con el fin de ocupar estos predios.

E.N.D.: ¿Cuándo recibió la primera amenaza?

A.E.L.G: Tuve una inicial a través de una persona que cuidaba uno de los terrenos y le tocó salir desplazado del municipio por intimidaciones de muerte. Eso se puso en conocimiento de la Fiscalía de Honda y la UNP. Inicialmente, me hicieron un estudio de seguridad y me brindaron ciertas medidas de protección, puse un recurso de reposición porque creo que no son lo suficiente para garantizar mi seguridad e integridad física.

A la fecha me siento abandonado por el Estado, cuando soy una de las personas que representa el Estado en el municipio y me encuentro solo en cuanto a protección.

E.N.D.: ¿Hubo otro tipo de advertencias?

A.E.L.G: Posteriormente recibí un sufragio, me llegan novenas en donde se rezan las nueve noches y documentos amenazantes que me han dejado en la oficina. Y ahora, el último, fue la que dejaron en la iglesia (Santa Ana) del municipio. Decía (al sacerdote) que hiciera ocho misas en nombre del personero del municipio y que si no lo hacía, él también iba ser declarado objetivo militar, por no hacerles caso.

E.N.D.: ¿Lo han abordado directamente?

A.E.L.G: En Ibagué abordaron a un empleado mío y con groserías se refirieron a mí e hicieron amenazas fuertes y me dejaron un ramo de flores, que esas eran las que me iban a tener que llevar al cementerio.

E.N.D: ¿Por qué se siente tan desprotegido?

A.E.L.G: Le comuniqué a la UNP inicialmente que sentía que estas medidas de protección no eran suficientes, toda vez que la mayoría del territorio en Falan es rural y creo que un chaleco y un celular no garantiza mi seguridad en estas zonas.

Ellos dicen que el estudio arrojó que las necesidades eran esas y que para ellos es suficiente. Hemos podido ver que en el territorio nacional han fallecido de forma violenta más de tres personeros, entonces no sé porqué el Estado no toma las medidas pertinentes para apoyarnos, sabiendo que somos los ojos de ellos en todos los municipios.

Me siento abandonado de los entes que son la Fuerza Pública y deberían apoyarnos en este sentido.

E.N.D: Las autoridades, ¿le han dicho de dónde surgen las intimidaciones?

A.E.L.G: No, simplemente se limitan a decir que en el municipio no hay personas de estos grupos, que ya no existen, que no es nada de eso. Que los documentos muchas veces como no tienen logo, no es producto de algún grupo en específico y cuando llevan logo, se limitan a explicar que son bajados de internet y que no tienen importancia, esas son las respuestas que uno obtiene por parte de ellos.

E.N.D: ¿Cuál es el antecedente del predio?

A.E.L.G: Uno de los predios que está en esta situación, fue decomisado a un presunto jefe paramilitar y lo han querido ocupar personas que no son habitantes del municipio, vienen de otras localidades.

E.N.D: ¿Cuál fue la intervención de la Personería en este caso?

A.E.L.G: Llegó una solicitud de acompañamiento de esta finca al inspector de Policía y él me comunicó estos procedimientos para que como Ministerio Público hiciera parte del proceso y saliera en defensa de las comunidades o de los que se crean con derecho de estos predios.

Entonces, me tomé la molestia de averiguar si la documentación que presentan y reposan en la inspección contaba con la autenticidad del caso. Ahí es donde me entero de la mala procedencia de la documentación y comienzo a ejercer vigilancia y a oponerme a la entrega de los predios.

Por lo que comunico (el hecho) a las diferentes autoridades, en este caso a la Fiscalía Sexta Especializada, quien era la que llevaba el proceso de extinción de dominios.

E.N.D: ¿Cuándo usted se dio cuenta e informó que había alteración de documentos, surgieron las intimidaciones?

A.E.L.G: Ahí comenzaron las amenazas.

E.N.D: ¿Cómo se adelantó el proceso?

A.E.L.G: Inicialmente ellos (reclamantes), pidieron un acompañamiento para que les entregaran el predio. Esa solicitud se la radicaron al inspector de policía de Falan. Aportaron un certificado de tradición del predio en donde la Fiscalía ordenaba el levantamiento de la medida, esa restricción de venta que tenía ese predio y un documento de la SAE en donde ordenaba que se entregara, pero ambos documentos eran falsos.

E.N.D: ¿Por qué hace pública esta situación?

A.E.L.G: Quiero hacerlo público porque la verdad me siento desamparado, por parte de las autoridades y como autoridad creo que merezco que el Estado valore el trabajo que hacemos como personeros y que de verdad nos apoyen, porque no podemos que por unas pocas personas, tengamos que dejar de hacer nuestro trabajo.

Y eso es lo que suele pasar en Colombia, tiene que operar el silencio y que las cosas se sigan llevando de la peor manera, porque nosotros no podemos ejercer el control, porque de una vez nos amenazan, nos toca hacernos a un lado.

E.N.D: ¿Ha pensado en renunciar?

A.E.L.G: La verdad no, porque eso sería darle gusto a las personas que no me quieren dejar trabajar y yo me comprometí con el municipio a trabajar y me voy a quedar.

 

Advertencia ‘religiosa’

EL NUEVO DÍA contacto al párroco de la iglesia Santa Ana, Oswaldo Oquendo, quien contó que según el documento recibido el personero fue declarado objetivo militar, “y me pedían celebrar unas misas por el alma de él, como por el eterno descanso y que si no las celebraba, pues tenía que atenerme a las consecuencias”. Agregó que es la primera vez que le sucede una situación así.

Este caso fue puesto en conocimiento del Obispo de la diócesis del Líbano, quien a su vez habría procedido a dialogar con el alcalde Forney Munévar, para determinar cómo actuar ante el hecho.

Credito
EL NUEVO DÍA

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