Las zonas beneficiadas son Gaitán, Mesa de Palmichal, una parte del corregimiento de Herrera “que venían pendientes del proceso de electrificación con recursos del Gobierno nacional y con el Departamental se cubrió una vereda más, que es San Rafael”.

La mandataria agregó que se está terminando la intervención en las veredas La Primavera, La Argentina, Belalcázar, Santana, “en las que era muy costoso acceder a recursos de electrificación, pero que hoy se logró con la ayuda del senador Miguel Barreto”.

En este tema, quedan pendientes 10 veredas más y la adquisición de una subestación para atender y mejorar el servicio en Herrera, este último proyecto “fue presentado a obras por impuestos, que con Enertolima y con la Agencia de Renovación del Territorio, se logró viabilizar, por lo que estamos en espera de obtener los recursos para invertir en Rioblanco en el tiempo que nos queda”.

Este proyecto que está estructurado quedó en el lista de espera tras la operación financiera que hizo Celsia sobre los activos de Enertolima, no obstante, la Administración municipal confía en que la nueva empresa tenga en cuenta la propuesta próximamente.

En cifras, en el primer convenio se invirtieron $6 mil millones, el segundo cerca de $3 mil millones, a lo que se le suma el aporte del Gobierno departamental que es cercano a mil millones de pesos.

Se calcula que en cada vereda hay cerca de 50 usuarios, familias rurales que cuentan ahora con condiciones más justas y dignas para vivir, hecho que aporta al desarrollo de las zonas más apartadas de Rioblanco.