Las controversias que giran alrededor del Malecón de Ambalema

Crédito: Hélmer Parra - EL NUEVO DÍA El Malecón de Ambalema es una de las apuestas para potenciar turísticamente al municipio, la solicitud de la Fundación es que la intervención sea amigable con el ambiente y el patrimonio.
La obra que fue contratada en la administración de Juan Carlos Chavarro Rojas es el centro de cuestionamientos por parte de la Fundación Ambaviva, pues se considera que ocasionará un daño ambiental y patrimonial, a lo que se le suma una solicitud de revocatoria de un permiso ambiental entregado por Cortolima.
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En diciembre de 2018 el Órgano Colegiado de Administración y Decisión, Ocad, de los Municipios Ribereños del Río Grande de la Magdalena y el Canal del Dique, aprobó la destinación de tres mil 178 millones 760 mil 189 pesos para ampliar el Malecón de Ambalema.

Dicha obra fue licitada en la administración de Juan Carlos Chavarro Rojas en 2019 y adjudicada en noviembre al único proponente, es decir, al Consorcio Ingeniería representado por Aitor Mirena de Larrauri Echeverría conocido como uno de los barones de la contratación en Espinal.

La prometedora obra que se anunció como una oportunidad de potenciar el turismo, es el centro de desacuerdos y cuestionamientos por parte de la Fundación Amigos de Ambalema Viva, Ambaviva, y varios habitantes, pues incluiría la tala de ocho árboles que tienen características de bosque seco tropical, al igual que, intervenir una parte del corredor férreo, que es propiedad de la Nación.

La propuesta consiste en la construcción de muros de contención, una rampa de acceso al río para permitir abordaje al ferry, un sendero peatonal, instalaciones eléctricas, zona de locales comerciales, al igual que, una plazoleta semicircular y obras de protección de la margen izquierda del río Magdalena, intervención que asciende a los $2 mil 889 millones.

A dicho valor se le suma $288 millones 978 mil de la interventoría que está a cargo de la Corporación Autónoma Regional del Río Grande de la Magdalena, Cormagdalena.

 

La transformación del Malecón

El 5 de marzo de 1980 el Centro Histórico de Ambalema fue declarado Monumento Nacional y en 2017 el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, Cnpc, aprobó el Plan Especial de Manejo y Protección, Pemp, también para el Centro Histórico. De esta forma, se reconoció oficialmente el gran valor cultural que representan la ‘Ciudad de las mil y una columna’ para el Tolima y el país.

En agosto de 2017 Alberto Escovar Wilson – White, director de Patrimonio del Ministerio de Cultura expresó que “el Pemp es una herramienta que se construyó en conjunto con los ambalemunos, para poder gestionar acciones relacionadas con la sostenibilidad y el disfrute responsable de su patrimonio cultural”, dicha apreciación fue registrada por este medio.

Dos años después, el mismo funcionario a través de la resolución Nº 2771 del 30 de agosto de 2019 autorizó la intervención del espacio público en área de Malecón que está ubicado en zona de influencia de la Estación del Ferrocarril de Ambalema.

“Van a echar cemento a todo lo que es la línea del ferrocarril, afortunadamente Invías dijo que no dejaba tocar eso, pero el proyecto inicial era coger y echar cemento a todo esto, tumbar árboles y calentarnos más”, dijo Ricardo Borrero, presidente de Ambaviva.

El hombre agregó que tras diferentes consultas adelantadas por la Fundación, conocieron que la Alcaldía de Ambalema en mayo de 2017 certificó que los “predios donde se realizará el proyecto Ampliación Malecón Ambalema, tienen la posesión por parte del Municipio y su destinación es el uso público o la prestación de un servicio público”.

Pero tres años después, el Instituto Nacional de Vías, Invias, le informó a la actual Administración municipal que “el corredor férreo existente en Ambalema es propiedad del Instituto Nacional de Vías por transferencia de la extinta Ferrovías, mediante escritura Nº 2250 del 26 de junio de 2008 otorgada por la Notaría Nº 26 del Círculo Notarial de Bogotá”.

El documento de mayo 27 de este año, es firmado por Ricardo Antonio Corredor Parra, subdirector Red Terciaria y Férrea y se agrega que “a la fecha no se tiene solicitud de autorización o permiso de intervención por parte de la Alcaldía de Ambalema o Cormagdalena para la ejecución de obras en el corredor férreo presente en este municipio”.

Ante esta situación, Corredor Parra le pide al actual mandatario Justiniano Chacón Orjuela “abstenerse de adelantar o promover cualquier tipo de obra que afecte o comprometa el corredor férreo de propiedad de la Nación”.

Tras este pronunciamiento de Invías, el presidente de Ambaviva, Ricardo Borrero, comentó que la Fundación no se opone a la ampliación del Malecón siempre y cuando “se haga bonito, agradable y acorde con la naturaleza, que no tumben los árboles.

“Se beneficie a toda la comunidad y contribuya a preservar el medio ambiente y el bosque seco tropical existente en la ribera del río Magdalena, que se constituya en un elemento de progreso y atractivo turístico, que respete las normas técnicas, urbanísticas y ambientales”, precisó.

Por su parte, Óscar Mauricio Reyes Villamizar, arquitecto e integrante de la Fundación comentó que a nivel nacional hay planes de volver a utilizar la infraestructura férrea, “puede que no en todas estas zonas, puede que este corredor férreo no se vuelva a utilizar en carga, porque además las condiciones serían muy difíciles hoy en día, además hay otros ramales más eficientes.

 

Un ‘gurú’ de la contratación

En noviembre se conoció que el único oferente de la licitación fue el Consorcio Ingeniería, representado por Aitor Mirena de Larrauri Echeverría, una vez se adelantó la revisión respectiva, el comité evaluador calificó su propuesta con 800 puntos de mil posibles.

Con el resultado definido, la Alcaldía de Ambalema adjudicó el contrato a través de la resolución 518 de 2019, el objeto es la ampliación del Malecón por un valor de $2 mil 889 millones 781 mil con un plazo de ejecución de seis meses.

Del contratista Aitor Mirena de Laurrari Echeverría se sabe que es uno de los mayores contratistas en el Tolima. El considerado ‘gurú’ de la contratación estatal, logró acceder a la ejecución de proyectos  durante las dos administraciones del exgobernador Óscar Barreto y en la del exalcalde de Ibagué Luis H. Rodríguez. En algunos círculos políticos se dice que su padrino es Emilio Martínez exrepresentante del partido Cambio Radical en el Tolima. 

En artículo de EL NUEVO DÍA del 28 de agosto de 2016 se expuso un informe de la Auditoría General de la República y las mallas empresariales de contratación en el país. En el caso del departamento se identificaron cuatro, una de ellas era la integrada por Larrauri Echeverría, en esta época su mayor contratación se registraba en Espinal, Purificación y Melgar.

 

“Pero de todas maneras (ya sea) por su conservación como patrimonio histórico de los colombianos o porque se puede necesitar en otras zonas del país, esos corredores férreos son propiedad de la Nación y tienen que ser respetados, los alcaldes no pueden intervenir unilateralmente”, comentó.

 

¿Árboles por cemento?

A través de la resolución 3139 del 05 de septiembre de 2019 la Corporación Autónoma Regional del Tolima, Cortolima, entregó “un  permiso de ocupación de cauce y aprovechamiento forestal” al Municipio para adelantar el proyecto. El documento  explica que se adelantó un “recorrido desde la actual plazoleta hasta donde se ubicaría la rampa de acceso del ferry”.

De la misma forma, precisa que para la protección del talud de la margen izquierda del río en toda la “longitud del sendero se construirá un muro de contención en concreto, el cual será protegido con la base de colchacreto para prevenir la erosión por el flujo del río”.

En la resolución de la Corporación, se señala que es necesario talar ocho árboles nativos de especie a piñón de oreja, cachimbo, guamo, acacia forrajera, payandé y nim y la poda de ramas en 75 individuos arbóreos.

Una vez adelantado el análisis correspondiente, la Corporación consideró que es “viable ambientalmente otorgar el permiso de ocupación de cauce”, pero se precisa que la estabilidad de las obras y el comportamiento estructural e hidráulico son responsabilidad del Municipio, al a igual que, “las afectaciones que se puedan generar a terceros o al entorno”.

Igualmente, especifica que la madera de estos árboles, que en cuentas de habitantes de la zona tienen por lo menos 50 años, se podrá utilizar en el proyecto, “no podrá ser movilizada o comercializada”. 

En cuanto a la compensación ambiental se indica que se deberá adelantar la siembra y mantenimiento de 80 árboles de especies forestales nativas como caracolí, nacedero, cámbulo, entre otras, plantas que deberán quedar en zona protectora del río Magdalena en área de influencia del proyecto.

Mientras que la compensación por el permiso de la ocupación del cauce, consiste en adelantar la siembra y mantenimiento de 500 árboles de especies nativas de fácil adopción a la zona, las cuales deberán ubicarse en área de influencia del proyecto y adelantar el mantenimiento respectivo.

 

Dato:

La fuente de recursos corresponde al Sistema General de Regalías para proyectos de inversión de los municipios ribereños al Magdalena a través de Cormagadelena.

 

¿Y qué responde el exalcalde?

En diálogo con esta redacción el exmandatario Juan Carlos Chavarro dijo que este proyecto  duró cerca tres años de gestión e hizo parte de su Plan de Desarrollo, asimismo, que pasó por la revisión de Cormagdalena, los ministerio de Transporte, de Vivienda y de Cultura, a los que sumó Cortolima. 

 

EL NUEVO DÍA: ¿Cómo entregó este proyecto a la nueva Administración municipal?

Juan Carlos Chavarro: Quedó adjudicado, con contrato listo después de un proceso licitatorio y a la espera de Cormagdalena, entidad que tiene a cargo la interventoría, la contrate para poder iniciar.

 

E.N.D.: ¿Cómo visionó esta obra para Ambalema?

J.C.C.: Se mejora la competitividad, la infraestructura turística, aparte que (generará) seis meses de mano de obra y más en estos días de pare económico. El Malecón actual es una obra que se realizó en 2007, la visión que teníamos nosotros era extenderlo, pasarlos por frente de la Estación del Ferrocarril, que también fue restaurada por Invías, poder llevarlo hasta más abajo para que el ferry pueda transportar carros más grandes de lo que hace actualmente.

 

E.N.D: Una de las preocupaciones es que parte de los rieles existentes quedarían ocultos entre cemento…

J.C.C.: Primero, los rieles que están frente a la Estación, de milagro no se los han robado, la red férrea del municipio hace rato se la robaron, prácticamente lo que queda está dentro de la zona urbana y esa parte, lógicamente, va a quedar dentro del sendero peatonal y al contrario va a quedar resaltado para el disfrute visual de las personas. No se van a tocar, va a quedar como punto de atracción.

 

E.N.D.: Según el permiso entregado por Cortolima se talarán ocho árboles a raíz del proyecto, se dice que prácticamente se están reemplazando por un muro.

J.C.C.: Los árboles no son centenarios ni milenarios, fueron identificados por Cortolima, de los ocho hay algunos dentro de la ribera, hay que moverlos y otros están en la zona que posiblemente dan acceso al ferry, son ocho de cientos que hay en el tramo del proyecto. Entiendo que la actual Alcaldía está revisando la posibilidad, con el contratista, qué modificaciones y qué árboles de los ocho se puedan salvar haciéndole algún cambio al diseño.

 

E.N.D.: También hay desacuerdo por el muro de contención, ¿se perdería en un tramo la vista al río?

J.C.C.: No, lógicamente hay un muro de contención porque el Malecón está elevado sobre el río, el muro dio la posibilidad que Cormagdalena lo patrocinara, porque lo que le interesa como entidad, es que se controle la erosión. Se está definiendo si es muro o balaustre para que la gente se arrime y haya una medida de protección, la vista al río se mantiene porque lo que estamos es invitando a que se pueda disfrutar de un gran paisaje. Los diseños los avaló el Ministerio de Vivienda, lo que tiene que ver con espacio público, fue una arquitecta e insistió en la arquitectura y la belleza.

Después el Ministerio de Cultura también lo avaló en el sentido de que no fuera a interferir con el paisaje del río. Los dos señores (de Ambaviva) tienen sus intereses personales en el proyecto, uno es propietario de la única vivienda que está dentro del proyecto y él no quiere, porque se le va a acabar la paz porque va a ver mucho ruido y el presidente de la Fundación, es porque  manejó el restaurante del Malecón y yo se los quite.

Consecuencias de no hacerlo (la obra), primero hay que indemnizar al contratista y a los interventores, ya tienen unos derechos adquiridos y han gastado dinero. Esos recursos que deberán salir del propio municipio, lo segundo es que al ser plata de regalías, regalías la recoge, entra en su bolsa nuevamente y no va volver a tener en cuenta a Ambalema para nada.

 

E.N.D.: Una pregunta que surge a nivel general es que se destinarán tres mil millones de pesos al Malecón y no sucede lo mismo con lugares insignias como la Casa Inglesa o la Factoría.

J.C.C.: Siempre le he dicho al Ministerio de Cultura, muy bonito todo, nos hicieron el Pemp, quedó muy bonito el libro y el estudio, quedaron una serie de proyectos, incluido la Ampliación del Malecón y adecuar el frente de la Estación, pero para poderlo ejecutar se necesita plata y el Ministerio para eso no aporta un peso. El llamado que le hago la Ministerio de Cultura es bonito vigilar, salvaguardar el patrimonio pero también hay que colaborar.

El año pasado presenté un proyecto para los estudios y diseños de la cúpula, y lo negaron, el municipio gastó plata, porque quieren que lo hago un restaurador. Por qué los estudios y diseños de la Factoría no se los regala el Ministerio al Municipio, a eso hay que entrar a trabajar y ese el llamado a la Fundación Ambaviva. 

 

E.N.D.: De otra parte, llama la atención que al proceso de licitación se presentó un solo licitante y resultó siendo del Espinal, cercano a Emilio Martínez de Cambio Radical.

J.C.C.: El ingeniero Aitor Mirena de Laurrari no es solo contratista del Espinal, ni contrata con los alcaldes de Cambio Radical, contrata con la gobernación de Óscar Barreto, con gobernaciones (como la de) Cundinamarca, ahí están tratando de hilar muy fino con ese cuento, y estoy seguro que todo el proceso contractual aguanta una inspección de Fiscalía y Procuraduría porque no tuvo ningún problema.

Aitor Laurrari hizo el malecón de Purificación, o sea tiene la experiencia, entonces antes de hilar tan fino deben mirar el proceso y mirar el tema (para) definir porque se presentó un solo proponente, que no es pecado (…) ¿que por ser del Espinal, todos son amigos de Emilio Martínez?, no, es tanto así que allá la mitad de la gente lo quiere y la mitad no lo quiere, por el hecho de ser del Espinal, no quiere decir que es de Emilio.

 

Dato:

Cabe recordar que según el presupuesto conocido, el valor del muro es de $524 millones 972 mil y del colchacreto más los pilotes es de mil 088 millones de pesos.

 

Objeción del Ministerio Público

Sin embargo, pasados ocho meses el procurador Judicial, Ambiental y Agrario para el Tolima, Daniel Rubio Jiménez, le solicitó a la actual directora de Cortolima, Olga Lucía Lannini, la revocatoria directa de la resolución.

Por medio de un oficio del pasado 8 de mayo, el órgano de control expone que la Corporación debió ser “más rigurosa, pues la intervención se haría sobre una zona de vida muy sensible a los cambios y a la presencia o ausencia de especies: el bosque seco tropical”.

De la misma forma, explica que se necesitaba un informe técnico científico que definiera la necesidad de adelantar la tala, “o si por el contrario, lo procedente en términos científicos, era su trasplante o reubicación”.

También, se precisa “en este caso, como en todos, debe privilegiarse por parte de Cortolima la ética ambiental, aunque resulte más costosa en términos presupuestales y temporales y más compleja en términos técnicos. Es decir, es posible que el trasplante o la reubicación de estos individuos arbóreos aislados resulte más costosa, complicada y demorada que su simple tala, pero en términos de costo - beneficio, los réditos para el paisaje (...) son mucho mayores”.

El Procurador Judicial, Ambiental y Agrario para el Tolima, le solicita a la Directora negar la tala de los ocho árboles para el proyecto y en cambio pide que se ordene a la Alcaldía de Ambalema “trasplantar o reubicarlos”.

EL NUEVO DÍA se contactó con Cortolima para conocer qué se puede conocer sobre el proceso y que le puede responder a la comunidad ante el desacuerdo expresado. En respuesta suministrada por la Oficina Jurídica se explica que se emitió la resolución Nº 3139 el 15 de septiembre de 2019 “la cual concede los permisos quedando ejecutoriada el 25 de septiembre de 2019”, también, se explica que se le comunicó al Procurador según oficio Nº  23874 del 11 de septiembre del año anterior.

Se precisa que actualmente, la autoridad ambiental está en trámite y análisis de las solicitudes de revocatoria, pero que al ser un acto administrativo ejecutoriado se va a adelantar un proceso de verificación y seguimiento de lo ordenado por la Corporación.

La Fundación durante este tiempo ha oficiado a diferentes entidades gubernamentales y logró adelantar una reunión con el mandatario Justiniano Chacón Orjuela, allí se expuso la necesidad de rediseñan el proyecto pues en su concepto se necesita la construcción de unas obra que beneficien realmente a toda la comunidad de Ambalema, sin poner en peligro su ecosistema y el del principal río de Colombia.

Por su parte, el alcalde Chacón Orjuela indicó que el proyecto es relevante para su municipio, “nosotros recibimos el proyecto contratado con pago de estampillas, avanzado. Hoy hay una preocupación porque hay unas observaciones en parte del proyecto, habían que replantearlas y ya  la estamos organizando y socializando”.

En cuanto al muro que iba a obstaculizar la vista hacia el río Magdalena, “ya esa parte de esa observación se superó”, en cuanto a la de los árboles, el mandatario explicó que aunque se tiene el permiso ambiental “no queremos ir en contra de alguna situación especial que esté presente y estamos terminando de concertar y de sacar adelante el proyecto y viabilizarlo para que sea una realidad para el desarrollo de Ambalema”.

Chacón resaltó que hace muchos años no llegaba una obra de un valor similar, además, se debe adelantar porque ya está contratado, de lo contrario jugaría en contra de las arcas del municipio.

 

Credito
EL NUEVO DÍA

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