En esta acción de las autoridades se produjo la captura de 7 personas y la destrucción de maquinaria que era utilizada para la explotación ilegal de recursos naturales.

En dos puntos diferentes del río se realizaban actividades de draga sobre la fuente hídrica, ocasionando graves afectaciones tanto al suelo como a la flora y la fauna.

Según informó Cortolima, estas actividades ilícitas causaron daños a las propiedades físicas, biológicas y estructurales del suelo, ya que para obtener el material para ser lavado, se efectuó la remoción de la cobertura vegetal y de la capa orgánica del suelo, así como la tala de 8 árboles.

Se logró la incautación de una draga mecanizada y tres motores, los cuales fueron destruidos por las autoridades en el mismo lugar.

Esta maquinaria estaba avaluada en más de 9 millones de pesos, además de ello arrojaban una cantidad de 40 gramos de oro a la semana y les daba un rendimiento de más de $15 millones mensuales a las personas hoy capturadas.