Incendio deja daños irreparables en cerros del oriente del Tolima

Crédito: Suministrada - EL NUEVO DÍACon el apoyo de la Brigada Forestal del Ejército y la disposición de 21 hombres se logró contener el incendio de forma manual y la Fuerza Aérea hizo descargas en puntos específicos para mitigar las llamas.
La búsqueda de ampliar la frontera agrícola habría sido el detonante del incendio forestal que arrasó con alrededor de 200 hectáreas de los cerros Peñón Blanco, Novillos y el Páramo ubicados entre Cunday y Carmen de Apicalá. A pesar de las campañas de prevención y las advertencias para evitar los llamados incendios controlados, la costumbre en algunos casos sigue pesando más que la conciencia ambiental.
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El alcalde de Cunday, Luis Gabriel Pérez, informó que gracias al esfuerzo de diferentes autoridades departamentales y locales en conjunto con la administración de Carmen de Apicalá, se logró extinguir el fuego que llevaba tres días; no obstante, el panorama que quedó es desolador.

“Es una prueba superada; sin embargo, lamentamos mucho, fueron casi 200 hectáreas que quedaron totalmente calcinadas, la pérdida de capa vegetal, de algunos animales fue irremediable. Es el incendio forestal más grande que hemos tenido en la historia de Cunday, según tengo antecedentes, pero gracias a la participación de muchas entidades podemos responder oportunamente y ya no hay ningún foco de incendio”, comentó Pérez.

El sector afectado se conoce como el Páramo, allí nacen los afluentes hídricos que surten la planta de tratamiento del casco urbano Cunday y a su vez colinda con la vereda Cuatro Esquinas de Carmen de Apicalá.

En cuanto al origen de las llamas, las investigaciones preliminarmente apuntan a que fue generado “por algunos finqueros que iniciaron algunas quemas sin control, irregulares e ilegales y se desbordaron y por eso inició. Es una práctica que se repite año tras año y pone en zozobra a todo el pueblo de Cunday”, mencionó el Alcalde.

Pérez agregó que con Cortolima se adelantó el proceso de vigilancia y sancionatorio para quienes adelantan dichas prácticas irregulares, “hay algunas personas que se han individualizado frente a los hechos que ocurrieron. Tenemos serios indicios de los ciudadanos que iniciaron este incendio”.

La problemática identificada es que hay algunos lugareños que en su afán de extender sus  cultivos, invaden zona de bosque y complementan sus acciones con las quemas mal llamadas controladas.

El mandatario explicó que en esta ocasión solo se tienen algunos testimonios, por lo que el paso siguiente es “iniciar procesos ante Cortolima para la sanción respectiva y los procesos policivos ante el municipio; sin embargo, es difícil porque se debe coger a las personas en flagrancia”.

En la emergencia, que se registró en una zona de difícil acceso, se contó con los cuerpos de Bomberos Voluntarios de Carmen de Apicalá y Cunday, la autoridad ambiental y las Fuerzas Militares, “es algo de resaltar, porque en estos momentos en donde muchas personas están tratando de enlodar a los militares y a la policía, el incendio se apaga gracias a la colaboración oportuna del Ejército, la Fuerza Aérea, la Policía Nacional y la intermediación de Cortolima”. 

Las imágenes muestran un paisaje totalmente desolado, motivo por el cual, el reto ahora es iniciar un programa de reforestación y fortalecer el cuerpo bomberil, igualmente, crear acciones que ayuden a prevenir este tipo de emergencias.

Daños irreparables

Desde el lado de Carmen de Apicalá, el comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios, Henry Morales, coincidió en que quedaron daños irreparables, especialmente para el municipio cundayense, allí “lo que es el abastecimiento del acueducto municipal se va a ver afectado por un buen tiempo, porque quedó arrasado los nacimientos de agua que llevan el suministro al acueducto municipal de Cunday”.

Morales explicó que aunque Carmen de Apicalá y sus cerros son susceptibles a incendios forestales, en años anteriores no se había registrado uno similar. En 2019 “tuvimos afectaciones por los lados de Siberia, pero no se había quemado la parte de la Enramada, en este año se quemó toda esta área que es como una cuenca y allí nacen varias quebradas, que convergen en una sola que se llama la Enramada en Cunday”.

El comandante agregó que a pesar de que se han tenido algunos días de lluvia, la temperatura en este municipio del oriente del Tolima en ocasiones supera los 35°C y hay momentos en que la sensación térmica es mayor de 40°C.

Finalmente, teniendo en cuenta que en gran medida el fuego es originado intencionalmente Morales señaló que se deben adoptar todas las medidas de precaución, “muchas veces creen que con hacer una franja de uno o dos metros de ancho, con eso se va a contener el incendio, pero en ese momento no se tiene disponibilidad de agua para contener el incendio.

“Mientras vuelven a sus casas a traer agua o herramientas, el fuego con estos vientos que hemos tenido, se vuelve incontrolable”.

Credito
EL NUEVO DÍA

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