Tolima ocupó el tercer puesto con mayor extensión de cultivos de maíz transgénico

REDACCIÓN - EL NUEVO DÍA
El Departamento sigue su camino en el uso de semillas tecnificadas, en los cultivos de maíz. En la actualidad ostenta el tercer puesto en hectáreas sembradas.

Durante los últimos años, los productores de maíz de la región han implementado unas nuevas tecnologías que les ha permitido disminuir costos en mano de obra, facilidad de manejo y mejorar la calidad de las cosechas.

El Tolima, con 15 mil 503 hectáreas sembradas en el 2015, ocupó el tercer puesto con mayor extensión de cultivos de maíz orgánico transgénico en el país, después del Meta y Córdoba, según cifras proporcionados por Agro-Bio.

Según explicó María Andrea Uscátegui, directora Ejecutiva Agro-Bio, las semillas genéticamente modificadas, son un avance de la ciencia aplicada en plantas, cada vez más adoptadas por los agricultores del Tolima.

“La ciencia e innovación en semillas es una herramienta fundamental para impulsar el desarrollo agrícola para consolidar a la región como una de las mayores productoras de maíz y beneficiar a los agricultores, protegiendo sus cosechas, comodidad de manejo y disminución de costos de producción”, precisó Uscátegui.

Entre las bondades, está la fortaleza que tiene la planta para evitar la proliferación de plagas, facilidad de manejo para el productor y la calidad y rendimiento tras cada cosecha. Por supuesto, debe estar acompañada de prácticas agrícolas.

Cristian Alejandro Trujillo, agricultor de la meseta de Ibagué, viene trabajando con la biotecnología en sus cultivos, y destaca que han sido muchas las ayuda para la producción del cultivo.

“Los cultivos biotecnológicos han sido de mucha ayuda en cuanto al manejo y producción del cultivo, manejar mejor las malezas a un menor costo y teniendo mayor utilidad; uno puede aplicarle al cultivo un herbicidas por encima y no le va hacer daño al maíz, sino solo la maleza”, explicó Trujillo.

Tecnologías aplicadas

Hoy en día los agricultores aplican dos tipos de tecnologías en los cultivos de maíz, según indicó María Andrea Uscátegui, uno es la resistencia a unos insectos y la tolerancia a algunos herbicidas.

“La tolerancia a algunos insectos ofrecen servicios en cuanto a protección contra plagas, éstos pueden comerse las plantas cuando están muy joven, pican la planta lo cual les limita el desarrollo, pican el grano lo cual trae pérdidas en las cosechas”, sostuvo.

Por su parte, la tolerancia a herbicidas, es una aplicación que hace resistente a la malezas, lo cual facilita el manejo al agricultor y ahorra tanto en mano de obra como en fumigación.

“Siempre que se aplica el mismo insecticida, sea o no un cultivo BT, las plagas se hacen resistentes, de ahí la necesidad de sembrar refugios en una porción del cultivo con semillas sin la tecnología, para que los insectos se reproduzcan y la resistencia de los genes de las plagas se mantengan bajas y no acaben con todo un cultivo”, afirmó la gerente Ejecutiva Agro-Bio.

Uscátegui concluyó que: “los cultivos genéticamente modificados se han expandido a lo largo del territorio nacional debido al voz a voz de los agricultores que han adoptado la tecnología; además, cada vez hay mejores desarrollos en este campo, oferta de semilla y los resultados son notables”.

Credito
EL NUEVO DÍA

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