Según explicó Jaime Eduardo Bravo, gerente de Agroindustrial de Pajonales, este acuerdo de voluntades que firmaron distritos de riego que agrupan 70 mil hectáreas del Tolima, productores de semillas, la Andi y la academia se da debido a los bajos indicadores de competitividad de los productores colombianos comparado con otros países de Latinoamérica, “somos el único país de América con indicador negativo, según cifras de la FAO”, dijo.

“El modelo arrocero colombiano es perverso, está hecho para ser de baja competitividad y con poco futuro, este se tiene que cambiar por que así como están haciendo las cosas los agricultores y eslabones anexos, nos van a llevar al fracaso y la desaparición”, agregó el funcionario de Pajonales.

Bravo señaló que con el apoyo de los diferentes sectores se busca avanzar en investigación y aplicación de buenas prácticas que mejoren la productividad, como lo es el hecho de usar semillas legales que tienen mejor rendimiento.

Sin embargo, llama la atención que de un acuerdo que busca mejorar la situación del sector arrocero nacional, no haga parte la Federación Nacional de Arroceros (Fedearroz), gremio que a lo largo de la historia le ha apostado a proteger a los cultivadores y también a la investigación y productividad, aunque los organizadores del evento sí hayan invitado a Gonzalo Sarmiento, miembro de la Junta Directiva de la agremiación al foro que antecedió el anuncio del acuerdo.

Bravo dijo que Fedearroz no está en el convenio porque no aceptaron la invitación: “Los hemos invitado a participar en varias ocasiones pero han tomado la decisión de hacer cosas diferentes. Cuando ellos quieran entrar podrán hacerlo, este es un proceso incluyente y las puertas están abiertas para la gente que quiera sumar y engrandecer el proceso, si alguien quiere entrar a dividir, a restar no será bienvenido”, dijo Bravo.

Ante la situación, Sarmiento aseguró que nunca se invitó al gremio a participar del acuerdo como sí se hizo para invitarlo a hacer parte del foro o a comprar un espacio para un stand en Agroshow, pero nunca para trabajar por la competitividad del sector.

En ese sentido desde Fedearroz consideraron “curioso” que no se les haya invitado y se diga que no se ha avanzado en la productividad del sector sabiendo que desde hace cinco años el gremio apoya a los productores con el programa Adopción Masiva de Tecnología (Amtec), con el cual se ha beneficiado la gran mayoría de las 107 mil hectáreas de arroz del Tolima, además consideró que no se puede equiparar los sectores arroceros de Colombia con el de otros países, pues las dinámicas de riego son muy diferentes.

Cifras de Fedearroz indican que el rendimiento por hectárea en el departamento antes del Amtec era de 6.819 kilogramos, mientras que en aquellos predios donde se inició con el programa se logró un rendimiento de 7.292 kilos por hectárea.

Asimismo, los costos por tonelada de arroz con Amtec fueron de $764.072, es decir $155.218 menos que el sistema de cultivo tradicional, una reducción del 16%.