Una entidad bancaria, un establecimiento de giros y encomiendas, y un centro de trámites de licencias son los escenarios donde delincuentes armados hurtaron el dinero que en ese momento reposaba en las cajas. En uno de los casos, tras la acción de la Policía y la colaboración de la ciudadanía se logró la captura de dos sujetos.

Robo número Uno
El primero de los hurtos se registró sobre las 11:00 de la mañana en una de las sucursales del banco Davivienda, ubicada en la carrera Quinta con calle 28. En versiones entregadas a EL NUEVO DÍA, comerciantes del sector aseguraron que en ningún momento notaron algo extraño.

“Ahora como roban tan tranquilos (…). Entraron al banco como ir y retirar cualquier cosa, tanto así que nadie se dio cuenta por aquí de que eso ocurrió”, dijo un vendedor cercano al lugar, quien pidió reserva de su nombre.

Una mujer que estaba al interior de Davivienda le contó a su hija, en una llamada, que dos hombres habían entrado armados exigiendo al personal de las cajas que entregara el dinero. Contó que quienes estaban haciendo fila no fueron víctimas de estos hombres.

Entre tanto, unidades de la Sijín de la Policía Metropolitana y del CTI de la Fiscalía llegaron hasta la entidad bancaria y de inmediato iniciaron las investigaciones. Quienes estaban en el interior del banco tuvieron que esperar por cerca de dos horas.
    
Robo número Dos
Mientras las unidades de la Policía atendían la emergencia en la 28 con Quinta, una nueva situación de hurto se estaba registrando en un Efecty Servientrega, ubicado también en la calle 28, pero, esta vez, con avenida Ambalá.

Según pudo conocer esta redacción, tres hombres llegaron hasta el sitio con una caja simulando que querían enviar una encomienda; en el instante en que la joven recibía el paquete, los sujetos la intimidaron con un arma de fuego.

Sin embargo, un policía que hace parte del cuerpo de seguridad de un coronel de la Policía se percató de lo sucedido y de inmediato inició la persecución de estos tres hombres, que, ante la reacción de la Policía, dispararon en varias ocasiones. Los uniformados también respondieron.

A ello, se sumó la colaboración de algunos taxistas que estuvieron atentos a la persecución; gracias a uno de ellos, fue capturado uno de los hombres.

En diálogo con EL NUEVO DÍA, este conductor, quien decidió no suministrar el nombre, dijo haber visto cuando los hombres salieron corriendo del Efecty y, detrás de ellos, el Policía.

“Vi a esos desgraciados y pensé que le habían hecho algo a esa muchacha de Servientrega, el corría y disparaba, pero en una de esas casi que le echo el carro y le grité que se detuviera. El hombre estaba muy cansado por la persecución”, dijo el taxista.

Tras la operación, dos de los tres sujetos fueron capturados y puestos a disposición de las autoridades competentes. El dinero fue recuperado.

Las autoridades hablan
Ante los hechos de delincuencia registrados ayer, el comandante de la Policía Metropolitana, coronel Fernando Murillo, manifestó que apenas se conoció del robo fue activado un plan candado y se instaló retenes para dar con la ubicación del carro donde supuestamente se movilizaban los responsables del hurto.

Indicó Murillo que en uno de los puestos de control, un hombre se tiró del vehículo y emprendió la huida al notar la presencia de los uniformados.

El carro Renault Clio Rojo, de placas BDP 588, fue inmovilizado. En su interior fueron halladas una gran cantidad de dinero y un arma de fuego. Según los informes preliminares, se trataría de la suma de seis millones de pesos.

Por otro lado, señaló que al parecer los responsables del robo eran integrantes de una banda procedente de Medellín. “Estamos a la espera de la individualización de cuatro personas que fueron encontradas en un hotel de la ciudad celebrando”, indicó. Se cree que estas personas tienen relación con el caso de Davivienda, pero, al cierre de esta edición, la autoridades intentaban judicializarlas, ya que no fueron capturadas en flagrancia.

Robo número Tres
También ayer en horas de la mañana, hasta el Centro de Reconocimiento Médico del Tolima, ubicado en la avenida Quinta con calle 13, un sujeto llegó intimidando al personal que laboraba en ese momento.

Aún se desconocen los responsables y las autoridades todavía no dan cuenta de la recuperación de este dinero.