Ocho personas detenidas tras ataque contra busetas

Crédito: Suministrada / Q’hubo.Estos son los capturados durante los desmanes en la noche del martes.
De acuerdo con Sitsa, Sistemas Integrados de Transporte S.A.S., el vehículo quemado estaba afiliado a la empresa La Ibaguereña, mientras que los otros estaban adscritos a la cooperativa Cotrautol.
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Un hecho sin precedentes en Ibagué ocurrió la noche del martes, donde encapuchados arremetieron contra vehículos de servicio de transporte público en la calle 42 con carrera Cuarta Estadio.

Las autoridades se enfrentaron contra los vándalos en medio de gases lacrimógenos, piedras y bombas ‘molotov’. Al final, fueron aprehendidas ocho personas, entre ellas tres menores de edad.

 

‘Secuestraron’ y dañaron las busetas

Una noche de tensión se vivió en inmediaciones del campus de la Universidad del Tolima, debido a los actos vandálicos que cometió un grupo de ‘capuchos’. Los individuos con sus caras tapadas cogieron una buseta y la llevaron hasta la Alma máter para usarla como barricada: “Iba llegando al Estadio y me la quitaron. Se subieron y bajaron a los pasajeros y se me llevaron la buseta”, refirió el conductor.

Al parecer, el hecho fue planeado con antelación. Fuentes del gremio de conductores informaron que en la calle 15 se subieron unas personas a la buseta y cuando transitaban por Los Mártires, otro grupo de sujetos esperaba la ‘naranja’ para atacarla. 

Pero no fue la única. Otro vehículo que cubría la ruta 14 fue retenido en el viaducto del Sena, luego de que varios sujetos se atravesaron en el camino del conductor. En total, los delincuentes se apoderaron de cuatro busetas y luego las llevaron hasta la entrada de la Universidad del Tolima. 

La angustia se apoderó de los profesionales del volante al observar sus vehículos en poder de los malandros que, supuestamente, conmemoraban el Día del Estudiante Caído.

 

Las quemaron 

Un grupo de encapuchados se montó sobre una de las busetas y luego le prendió fuego, dejando al dueño y al conductor sin su sustento económico. A los otros tres vehículos les rompieron los vidrios y les quitaron varios elementos como puertas. Los desmanes dejaron millonarias pérdidas materiales y sin empleo a varios conductores. 

BUSETA INCINERADA

Sobre las 8 de la noche fue suspendida la circulación de busetas en la ciudad. Varios usuarios tuvieron que pagar taxi porque ningún vehículo continuó con su ruta, ante el temor de que otras ‘naranjas’ fueran blanco de los delincuentes. 

Hernán Quiñones Ariza, gerente de Sistemas Integrados de Transporte S.A.S. (Sitsa), pidió respeto por el gremio y los usuarios del transporte público colectivo. “Las empresas de transporte urbano colectivo de pasajeros de la Ciudad exigen a la Administración municipal garantías de seguridad serias y confiables que permitan continuar con la prestación del servicio como derecho esencial y fundamental”, aseguró el directivo.

INCINERADA 2

Cotrautol se pronunció

Una de las busetas afectadas fue la de placa UTW 340, conducida por Héctor Vergara. De acuerdo con Cotrautol, el conductor cubría la ruta 35 y cuando estaba detenido en el semáforo de la calle 42 con carrera Cuarta, salieron varios individuos y lo amenazaron con romper los vidrios del vehículo. 

COTRAUTOL

Sobre la situación, Cotrautol emitió un comunicado en el que pidió a la Policía, Fiscalía y autoridades competentes que protejan al gremio y sus trabajadores. “Solicitamos la protección del bien privado y garantías para ejercer el derecho al trabajo de más de mil trabajadores que hacen parte del sector del transporte. Un sector que ha sufrido graves afectaciones económicas por la disminución del tráfico de pasajeros y los impactos generados por la pandemia”, señala la misiva firmada por Paula Katerine Ramos Navarro, gerente de Cotrautol.

 

Enfrentamientos y detenidos

Debido a la destrucción de las busetas, miembros de la comunidad solicitaron la presencia de las autoridades en el barrio Santa Helena. Integrantes del Esmad arribaron a la zona y se enfrentaron a los encapuchados, que también fueron señalados de atacar al Comité de Derechos Humanos. Asimismo, miembros del Ministerio Público visitaron el lugar, pero no fue posible persuadir a los sujetos, que reaccionaron de manera violenta.

Hubo gases lacrimógenos para controlar a los encapuchados que de nuevo usaron el campus de la Universidad del Tolima para resguardarse de la arremetida de las autoridades. Utilizaron bombas ‘molotov’ para enfrentarse a los agentes del Esmad. 

Los disturbios acabaron sobre la 1 de la madrugada de ayer y habitantes del barrio Santa Helena también resultaron afectados. 

La Policía Metropolitana de Ibagué informó que sus hombres aprehendieron a tres menores de edad y cinco personas más fueron capturadas, señaladas de hacer parte del grupo que lideró los actos violentos y destructivos.

“Como autoridad tuvimos que intervenir con el personal de fuerza disponible y Esmad, donde recuperamos el sector aledaño a la Universidad del Tolima. Nosotros como Institución respetamos la protesta pacífica. Estaremos atentos para judicializar a los responsables”, refirió Jovani Benavides, comandante de la Metib.

Por su parte, el secretario de Gobierno de Ibagué, Carlos Andrés Portela, rechazó la destrucción de las busetas. “No vamos a permitir que unos vándalos quieran afectar la tranquilidad, seguridad y sana convivencia con una excusa de protesta, violentando los bienes públicos y afectando la economía de los ibaguereños”, expresó el funcionario.

Asimismo, el alcalde de Ibagué, Andrés Fabián Hurtado, publicó en su cuenta de Twitter: “Aquí ningún delincuente puede venir a sembrar miedo y caos, por eso la Policía Metropolitana actuó con prontitud y ya fueron capturados los presuntos responsables”. 

 

Los Detenidos

Aunque ocho personas fueron aprehendidas por los actos vandálicos, en videos aficionados que circulan por redes sociales se observa que se trataba de un grupo bastante numeroso el que ocasionó los desmanes y desórdenes públicos. Estas son las identidades de los detenidos. Cabe recordar, que tres son adolescentes.

DETENIDOS

-Federico Céspedes Melo, de 33 años. Profesión veterinario.

-Luis Fernando Abello Ramos, de 25 años. Estudiante y gestor cultural. 

-Jhonatan Andrés Márquez Torres, de 23 años. Trabajador independiente.

-Luis Alejandro Guacharna Jiménez, de 22 años. Estudiante.

-Óscar Julián Cubillos Bejarano, de 19 años. Independiente.

 

“No son estudiantes”

Por su parte, el comité de Salud de la Universidad del Tolima refirió a través de un comunicado, que los desmanes y daños los cometieron personas desconocidas y que no hacen parte de la institución y mucho menos pertenecen a movimientos estudiantiles, sociales y populares organizados en pro de la protesta social. “Lo cual nos deja una preocupación e incertidumbre acerca de los hechos que puedan llegar a suceder a partir de este momento”, señaló el Comité. 

 

Alerta temprana

La Comisión de Derechos Humanos del Tolima estuvo en el lugar de la asonada, pero también fueron víctimas de los ‘capuchos’. Mediante un comunicado, emitieron una alerta temprana durante la protesta e indicaron que quienes estaban cometiendo estos actos “no hacen parte de la protesta social, además los y las defensores de Derechos humanos fueron víctimas de ataques verbales y físicos e intentos de hurto de sus celulares”. Lo que obligó a que los funcionarios se retiraran del lugar. 

 

Pronunciamiento de la Universidad del Tolima 

La Universidad del Tolima, en cabeza de su rector, Ómar Mejía, rechazó de manera contundente los actos de violencia y destrucción que afectan a la comunidad ibaguereña y el buen nombre de la academia. “Como territorio de paz hemos promovido el diálogo social constructivo con todos los actores como el único camino para buscar salidas a la crisis estructural que vive el país. Por lo tanto, consideramos que no puede ser posible que dichas iniciativas, reconocidas por las comunidades indígenas del sur del Tolima, las organizaciones sociales y la ciudadanía en general, se vean opacadas por el accionar de unos pocos que todavía no comprenden que ninguna reivindicación o lucha debe transitar los caminos de la violencia”, señala un comunicado. Además, lamentó la quema de las busetas e hizo un llamado para que no usen de nuevo el campus universitario como un campo de batalla. “Hacemos un llamado a los organismos pertinentes, con el fin de que adopten las medidas tendientes a evitar que vuelvan a suceder situaciones difíciles que se han vuelto reiterativas en el barrio Santa Helena, lo cual genera zozobra y graves afectaciones a quienes residen, estudian, trabajan y tienen establecimientos comerciales a las afueras del campus universitario”.

 

DATO

De acuerdo con Sitsa, Sistemas Integrados de Transporte S.A.S., el vehículo quemado estaba afiliado a la empresa La Ibaguereña, mientras que los otros estaban adscritos a la cooperativa Cotrautol. 

Credito
Redacción Judicial

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