Al parecer, el bebé se acercó a la estufa y le cayó encima una sopa hirviendo. Sufrió quemaduras en el 50 por ciento del cuerpo y de manera lamentable falleció.

Se conoció que luego del accidente, la familia lo trasladó a la Clínica Nuestra, pero cuando la Secretaría de Salud del Tolima gestionaba el traslado helicoportado para un centro médico de mayor complejidad, en Bogotá, el niño murió.

“Tenía comprometidas las vías respiratorias. Los médicos advirtieron que no resistía el traslado en una ambulancia y cuando estábamos pidiendo colaboración de la Fuerza Aérea para trasladarlo, nos informaron el deceso”, dijo el secretario de Salud Jorge Bolívar. 

El funcionario hizo un llamado a los adultos para que estén más pendientes de los niños: “no debemos descuidarlos porque son niños y no miden el peligro y en cualquier momento puede ocurrir una tragedia”, señaló. 

Entornos seguros

El director regional del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf, Oscar Ríos también se refirió acerca del caso: “Lamentamos profundamente una situación tan horrorosa. La Defensoría de Familia conoció el caso y estudiaba la posibilidad del restablecimiento de derechos del niño, pero lamentablemente el menor no resistió las quemaduras. Le recordamos a los padres la necesidad de crear entornos seguros para los niños”, expresó. 

Agregó que en hechos como estos, el Instituto inicia una investigación administrativa, “estudiamos cómo está compuesta la familia, si hay más niños y cómo están si los hay. Ya la Fiscalía se trata de la investigación penal si es el caso”, puntualizó Oscar Ríos.  

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