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Los inmuebles, que habrían sido destinados a almacenar y servir de puntos de comercialización, estaban ubicados en los barrios San Bernardino I y José María Carbonel, en la localidad de Bosa; Danubio Azul, en Rafael Uribe Uribe; Lourdes, en Santa Fe; y San José, en Los Mártires.
Según explicó el ente acusador, la actividad ilegal fue desmantelada entre noviembre y diciembre de 2015 cuando fueron incautadas 8.344 botellas de licor como whisky, ron y vino, entre otros, los cuales estaban lejos de cumplir los estándares de autenticidad, calidad y seguridad para el consumo humano.
Adicionalmente, en las verificaciones se encontraron insumos líquidos y sólidos como estampillas, sellos y tapas falsificadas, entre otros elementos usados para la alteración de bebidas.
Los bienes, cuyo valor superaría los 2.500 millones de pesos, quedaron a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) para su administración.
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