Es más, hay cabildantes reincidentes como Emiro Murillo, a quien El Olfato captó el miércoles muy entretenido viendo un video de fútbol mientras se debatía la ampliación de la cárcel de Picaleña.

Murillo ya había sido ponchado por EL NUEVO DÍA totalmente absorto chateando en su Facebook durante la sesión en que el Concejo aprobó con su voto el polémico proyecto de las fotomultas.

El médico Carlos Jiménez es otro de los concejales que en medio de las sesiones ha sido descubierto embelesado en Internet navegando en páginas sobre la importancia del diente de león y otras plantas medidicinales, tal como lo reseñó EL NUEVO DÍA.

El Concejo carece de buena aprobación ante el pueblo ibaguereño y al parecer, por sus actos, a muchos concejales les da lo mismo.

El colmo ha sido la salida de la concejal Linda Esperanza Perdomo, quien propuso a la mesa directiva restringir el acceso de la prensa al recinto para evitar que se perjudique la imagen de la Corporación.

Tal vez, el episodio del concejal Emiro Murillo hubiera quedado en una imprudencia o descuido, pero la amenaza de la concejal Linda Perdomo no pasó desapercibida y tuvo eco en medios nacionales como La W de Julio Sánchez.

Concejal Murillo tuvo que salir a pedir disculpas por la acción, mientras su colega Linda Perdomo no se dejó ver ayer por la Corporación.