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La Organización Mundial de la Salud (OMS, octubre 16/2024) señala: “Los efectos combinados de la contaminación del aire ambiental y del aire doméstico se asocian con 6,7 millones de muertes prematuras” en el año 2020.
El informe Estado del Aire Mundial 2024, elaborado por institutos de investigación estadounidenses y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), señala: “La contaminación del aire fue responsable de 8,1 millones de muertes en el mundo en 2021, convirtiéndose en el segundo factor de riesgo de muerte, incluso en niños menores de cinco años. Las enfermedades no transmisibles, como las cardíacas, los accidentes cerebrovasculares, la diabetes, el cáncer de pulmón y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, representan casi el 90% de la carga de morbilidad derivada de la contaminación del aire”.
En países europeos (y otros) se han reportado muertes por contaminación generada por cocinas de gas. Euro News (31/10/2024) señaló: “Las cocinas de gas contribuyen a la muerte prematura de unos 40.000 europeos al año”. “El mundo es consciente de los peligros del dióxido de nitrógeno (NO2) que emiten las cocinas de gas. Otros contaminantes nocivos generados por la combustión de gas son: monóxido de carbono, benceno, formaldehído y partículas”. “Las cocinas de gas causan aproximadamente 367.000 casos de asma en niños y 726.000 en todos los grupos de edad”.
Algunas publicaciones señalan las poblaciones más afectadas. Inside Climate News (septiembre 10/2024) anota: “Las partículas finas contaminantes del aire (PM 2.5), han provocado una cantidad desproporcionadamente alta de muertes entre los estadounidenses negros. Un estudio de la Universidad de Stanford revela que las personas negras están expuestas a más contaminación y son más susceptibles a sus efectos adversos debido a la pobreza y al menor acceso a la atención médica”.
Algunas recomendaciones planteadas por las publicaciones citadas: 1. Campañas educativas sobre los riesgos de quemar combustibles (madera, carbón, gas, otros) y sus diferentes efectos al cocinar 2. Sugieren que las cocinas de gas “lleven etiquetas obligatorias sobre los riesgos de contaminación” 3. Tener ventilación adecuada. “Cuando cocine con gas, encienda la ventilación de la campana que debe estar sobre la cocina”. “Abrir ventanas” 4. “Cambiar la cocina de gas por una de inducción o eléctrica”. “Aunque puede ser una medida costosa”. 5. “Ciertas recetas liberan más contaminantes que otras. Estas incluyen recetas que requieren tiempos de cocción prolongados. Freír en abundante aceite suele utilizar una mayor cantidad de gas y tiende a producir niveles más altos de partículas” 6. Si puede: Utilizar filtros HEPA “que pueden eliminar hasta el 99,97% de las partículas suspendidas en el aire”.
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