Ya quedó comprobado tanto por su confesión como por las evidencias que encontró la Fiscalía, que Jhonier Leal mató a su hermano Mauricio Leal y a su madre, Marleny Hernández, porque quería quedarse con los bienes, en especial de Mauricio. Son miles de millones de pesos del patrimonio de Mauricio los que movieron a Jhonier a cometer los homicidios, sin embargo, de eso no le quedaría ni un centavo si la justicia civil considera que no es digno por el hecho de haber matado a su hermano y a su propia madre.

Dos días después del hallazgo de los cuerpos y minutos antes de dar su primera declaración ante la Fiscalía, Jhonier Leal había preguntado de manera insistente a la abogada de la familia sobre la herencia de su hermano.

‘’Pregunta insistentemente que, si él cae a la cárcel, pierde todos los derechos de su herencia, como heredero. La abogada le dice que no’’, aseguró José Jaír Ruiz, conductor de Mauricio Leal, en un audio presentado por el fiscal durante una de las audiencias.

No obstante, ni la abogada, ni el mismo Jhonier tuvieron en cuenta que en el ordenamiento jurídico colombiano existen la figura de indignidad para suceder, la cual se aplica a quienes asesinan a sus padres. En la sentencia SC 4540, del año 2020, la Corte Suprema de Justicia establece que hay tres requisitos que debe reunir una persona si tiene intención de heredar: vocación, dignidad y capacidad.

El primero se entiende como la prerrogativa que le permite a una persona reclamarle y recibir herencia, siempre que converjan las otras dos exigencias. Cita el artículo 1018 del Código Civil, según el cual, será ‘’capaz y digna de suceder (heredar) toda persona a quien la ley no haya declarado incapaz e indigna.

La Corte agrega que la indignidad sucesoral es una sanción legal o una pena de carácter civil que priva el heredero o legatario que incurra en cualquiera de las conductas y omisiones descritas en los artículos 1025 y 1029 del Código Civil del derecho a recoger la herencia. Ese tribunal preciso que medie una declaración judicial, es decir que debe iniciarse un proceso ante un juez de familia para que la decrete.

Recuerda que, en el derecho civil, el concepto de indignidad se aplica ‘’a los que por faltar a sus deberes para con un difunto, en vida de él o después de su muerte, desmerecen sus beneficios, y no pueden conservar la herencia que se les había dejado o a la que tenían derecho por ley’’, o como una ‘’especie de incompatibilidad moral’’ por la que el posible heredero puede ser excluido de la sucesión.

El numeral primero del artículo 1025 del Código Civil establece que ‘’son indignos de suceder al difunto como heredos o legatarios 1) El que ha cometido el crimen de homicidio en la persona del difunto, o ha intervenido en ese crimen por obra o consejo, o la dejó parecer pudiendo salvarla’’. Con base en esto, la Corte subraya que, para el legislador, ‘’quien obra de una manera tan reprochable puede mérito para acceder al derecho que, en principio, le asistía de heredarlo’’.

Para el abogado Abel Torras, consultado por Blu Radio. ‘’como doña Marleny falleció, si dejó un patrimonio, pues los llamados a la herencia son sus descendientes de grado más próximo, en este caso, sus hijos. Pero, como se produjo, por parte de un hijo el asesinato de su progenitora, el homicida se hace indigno de heredar sus bienes’’.

La otra herencia a la que aspiraría Jhonier Leal es la de su hermano Mauricio, que no tiene hijos. Pero si el otro hermano de Mauricio, es decir, Andrés García Hernández, que está preso en una cárcel de Jamundí, solicita la herencia y Jhonier es declarado indigno, sería Andrés el que se quedaría con esa herencia.

Además, el abogado explicó en la emisora, ‘’en este caso, Carlos Andrés puede iniciar ante un juez de familia un proceso para que se declare que Jhonier es indigno de suceder a su señora madre, Marleny Hernández y también a su hermano Mauricio Leal. Declarada la indignidad por el juez de familia, Carlos Andrés serpa el único heredero, tanto de su madre como de su hermano Mauricio.