Aunque con el ELN el Gobierno tuvo un fallido anuncio de cese al fuego, luego de que esta guerrilla por medio de un comunicado desmintió haber llegado a un acuerdo, este proceso continúa con las Disidencias de las Farc, que se dividen en las lideradas por ‘Iván Mordisco’ y la Segunda Marquetalia, además de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y las Autodefensas de la Sierra Nevada (ACSN).

Radiografía en el país

Según un informe de la Defensoría del Pueblo, las Disidencias de las Farc tienen presencia en 237 municipios y 29 departamentos del país, principalmente en Antioquia, Cauca, Nariño, Putumayo, Caquetá y Valle del Cauca, donde operan de manera distinta.

Sus principales fuentes de financiación son el narcotráfico, la minería ilegal y el contrabando, con un reciente incremento en los préstamos gota a gota. Además, continúan amenazando y asesinando a líderes sociales y reclutando a menores de edad.

En específico, las Disidencias de las Farc comandadas por Néstor Gregorio Vera, alias ‘Iván Mordisco’, cuyo origen es previo a la firma del Acuerdo de Paz en 2016, hacen presencia en el país principalmente con el Bloque Suroriental y el Comando Coordinador de Occidente.

El primero, según un informe del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), se compone de por lo menos siete subestructuras y tiene presencia en los departamentos de Amazonas, Arauca, Bogotá, Caquetá, Casanare, Cundinamarca, Guaviare, Huila, Meta, Putumayo, Vaupés y Vichada.

Por su parte, el Comando Coordinador de Occidente está conformado por diez subestructuras que se ubican en Cauca, Huila, Nariño, Putumayo, Tolima y Valle del Cauca.  

El informe de Indepaz revela que luego de la muerte de Miguel Botache Santillana, alias ‘Gentil Duarte’, y contrario a lo que se pensaba, existe una visible centralidad de mando que responde hacia ‘Iván Mordisco’.

Por su parte, la Segunda Marquetalia, según Indepaz, está conformada por al menos 11 subestructuras, las cuales tienen presencia en los departamentos de Amazonas, Antioquia, Bolívar, Caquetá, Cauca, Cesar, Córdoba, Guainía, Huila, Nariño, Norte de Santander, Putumayo y Tolima.

Control regional

Arauca ha sido utilizado por las disidencias como un territorio para obtener rentas financiándose con la extorsión y los “secuestros exprés”, además de las actividades ilegales de contrabando de ganado y bienes, sumado al robo de combustible, en la zona de frontera colombo-venezolana, según la Defensoría.

En el Caquetá, las disidencias creadas por ‘Gentil Duarte’ han aplicado los manuales de comportamiento de las antiguas Farc logrando la estandarización del cobro de extorsiones y restricción a la movilidad mientras que en la región del Catatumbo mantienen una disputa con el Ejército de Liberación Nacional, ELN.

Asimismo, han mostrado especial interés por el suroeste del país, donde las columnas ‘Dagoberto Ramos’ y ‘Jaime Martínez’ tienen una abierta articulación con economías ilícitas y han logrado imponer el control sobre la población civil, impartiendo justicia en veredas y poblaciones rurales.

Por último, el Frente Primero Carolina Ramírez y los Comandos de la Frontera -adscritos a la Segunda Marquetalia- han intensificado sus acciones armadas y violentas contra la población civil en la región suramazónica, en especial en el Putumayo y en zonas estratégicas donde buscan hacerse con el control territorial, como en el municipio de Puerto Leguízamo.

Sus principales fuentes de financiación son el narcotráfico, la minería ilegal, el contrabando y los llamados préstamos gota a gota, mientras que las amenazas a defensores de derechos humanos y líderes sociales, representan las conductas más recurrentes, subrayó la Defensoría.

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