Wilson Rodríguez, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio, ha enfatizado la necesidad de pavimentar y arreglar las calles del sector, las cuales cada vez se encuentran más deterioradas. En la carrera 12 entre calles 96 y 97, se evidencian huecos de gran escala, que se inundan cuando llueve, causando que varios automóviles queden anclados. Además de registrarse distintos casos de menores que han caído en las grietas.

El hundimiento de la malla vial causó que el 22 de diciembre del año pasado se quedará un taxi estancado, y a los dos días una camioneta de estacas.

La preocupación también se origina debido a que cerca a las calles, queda ubicado el Colegio Técnico Arkalá.

Por el momento, los habitantes de calle son quienes se han encargado de rellenar los agujeros con escombros para evitar accidentes.

Los habitantes del barrio han presentado un derecho de petición al Gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado, Ibal, radicado el 14 de diciembre de 2017, sin embargo no han obtenido respuesta alguna sobre el arreglo de las calles.

La urgencia se genera porque hasta que no se cambie la red de acueducto y alcantarillado, no se pueden pavimentar las vías. “El Ejército junto con la Secretaría de Infraestructura no intervienen hasta que no tengamos los certificados de acueducto y alcantarillado” afirmó Wilson.

Por el momento ya se cambió la red de alcantarillado. Frente a una de las calles se logró contratar a un Ingeniero para que ejecutara intervenciones puntuales en concreto o PVC.