Los habitantes del sector, liderados por la presidenta de la Junta de Acción Comunal, Magda Ruiz, llevan reclamando desde hace años el arreglo de sus calles, especialmente la 29, ubicada entre la carrera Cuarta Estadio y Cuarta Tamaná.

El pavimento se encuentra en mal estado y cada vez empeorando, dificultando el paso peatonal, de carros y motos. Además de encontrarse ubicada en la salida del Colegio Santofimio Caicedo, causando inconvenientes en la movilidad de los estudiantes.

La presidenta de la JAC, ha enviado en repetidas ocasiones solicitudes y derechos de petición al Ibal, buscando la rapidez en el arreglo.

Hace poco logró que intervinieran el alcantarillado de un tramo de la calle 29, sin embargo solo sería la mitad de esta. “Me dicen que no se puede hacer cambio de alcantarillado en el otro tramo porque hay un colector, pero no mencionan cuál es el estado del colector, si hay que repararlo o cambiarlo, o cuál es el inconveniente para saber qué se debe hacer”, agregó Ruiz.

Los vecinos costearán las acometidas que transportan las aguas negras de cada casa al sistema de alcantarillado, motivo por el que ya las solicitaron de manera escrita. Sin embargo, esto no se puede hacer hasta no saber el estado del colector. Ruiz ha solicitado a la empresa un certificado para así poder comunicar a la comunidad la gravedad de la problemática.

“No me parece correcto que arreglen la mitad de la calle cuando solicité la intervención completa de la vía (...) los ingenieros del Ibal han ido al barrio con el videorobot a revisar el tramo ya arreglado, pero no comentan nada”, añadió

Asimismo, un cráter en la calle 32 que cada vez está más grande, causando problemas no solo de movilidad sino también convirtiéndose en posadero de aguas negras.