Cuide su piel, el órgano más grande del cuerpo

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Una de las principales funciones de la piel es proteger los sistemas internos de los agentes nocivos que se encuentran en el exterior.

La piel es el órgano más extenso del cuerpo humano y su primera barrera contra agentes patógenos. Entre sus muchas funciones están las de regular la temperatura corporal, proteger las estructuras internas y proporcionar sensaciones como el tacto y la presión. Una piel tersa y luminosa es señal de salud.

Sin embargo, existen muchos factores internos y externos que pueden influir negativamente en su aspecto y correcto funcionamiento. Entre ellos se pueden destacar la exposición excesiva a la radiación solar, el uso excesivo de sustancias químicas como maquillajes, jabones, entre otros, el alcoholismo, tabaquismo, una dieta desequilibrada y poco saludable.

La piel es un órgano que actúa como barrera protectora, aislando al organismo del medio que lo rodea. Durante las vacaciones es común exponerla al sol, al viento y en algunos casos al frío extremo por tiempos prolongados, lo que causa resequedad, manchas, irritaciones y posibles quemaduras. Es importante actuar de forma inmediata si se ve alguna de estas reacciones y la mejor forma de hacerlo es hidratarla.

Los expertos recomiendan realizar exfoliaciones dos veces por semana, utilizar protector solar todos los días e hidratar todo el cuerpo.

Recuperar la piel maltratada durante vacaciones es una prioridad, y para esto aplicar productos compuestos por ingredientes naturales como vitamina E, aloe, lavanda, uva y en general aquellos que tengan como propiedad la hidratación, ayudarán a que este proceso de recuperación sea más rápido.

 

Tipos de mascarilla según su función

 Mascarilla de efecto tensor: se aplica húmeda y al secarse provoca una tensión que favorece la circulación sanguínea y la nutrición celular.

Mascarilla de efecto reafirmante: se aplica húmeda y al secarse provoca una tensión que reafirma los tejidos.

Mascarilla exfoliante: permite la eliminación de células muertas y secreciones de la piel.

Mascarilla hidratante: evita la evaporación del agua superficial de la piel, creando una barrera de protección, favoreciendo la desaparición de las arrugas y reafirmando las líneas de expresión facial.

Mascarilla estimulante: estimula los vasos capilares superficiales y favorece la nutrición de los tejidos.

Mascarilla de efecto aclarante: absorbe el exceso de melanina, eliminando manchas y pecas.

Mascarilla renovadora: elimina las células muertas de la capa superficial, y activa y acelera la renovación celular.

 

Reglas para cuidar la piel

 1 A cada tipo de piel, su cuidado: Para cuidar su piel teniendo en cuenta su naturaleza, asegúrese de elegir primero los productos adecuados para su tipo de piel. La piel seca tiene diferentes necesidades de la piel grasa.

2 Preste atención a las zonas más sensibles: Algunas partes del rostro, ojos, labios, etc, tienen una piel especialmente fina y frágil. Requieren de un cuidado especial.

3 Una limpieza suave: El cuidado de la piel sensible comienza con la limpieza. Para no atacar la piel y conservar su equilibrio, utilice desmaquillantes fisiológicos, especialmente formulados para cuidar su piel con cuidado.

4 El contorno de los ojos, una zona de riesgo: La piel del contorno de los ojos es diez veces más fina que la del resto del rostro. Para su limpieza, etenga una rutina específica.

5 La exfoliación es indispensable: Una o dos veces a la semana, recuerde usar un exfoliante adaptado. Debe ser eficaz, a la vez que suave y respetuoso con la piel. Haga una exfoliación fisiológica, ideal para suavizar y purificar la piel respetando su equilibrio.

6 La hidratación es esencial: La dermis está compuesta en un 70% de agua y la epidermis en un 15%. Para mantener un buen nivel de hidratación, es importante utilizar un cuidado diario hidratante que equilibre el nivel de agua en el corazón de la piel.

7 Tenga preferiblemente, un maquillaje hipoalergénico: Para evitar el riesgo de alergias asociadas con el uso de un producto que no se adapte a su piel, tenga un maquillaje hipoalergénico especialmente formulado para satisfacer las necesidades de todos los tipos de piel, incluso las más sensibles.

8 Cuídese del sol: Sea cual sea la estación del año, tenga un cuidado diario que incorpore un filtro solar. Este le permite mitigar los efectos adversos del sol, acelerador del envejecimiento cutáneo.

9 Cuidado con las agresiones externas: La contaminación, el tabaco, el estrés, entre otros factores, tienen un efecto adverso sobre la piel. Tenga en cuenta estos factores para proteger su piel antes de salir de casa.

Muy importante, limpie su piel por las noches, incluso si no se ha maquillado durante el día.

10 No se olvide de los labios: Cada vez que lo necesite, aplíquese una crema reparadora para los labios. Reaplique el producto cuantas veces quiera, ya que esta área es particularmente frágil.

 

Mascarilla exfoliante

 Miel y almendras:

Para preparar el más exquisito exfoliante casero solo necesita una cuchara sopera de miel y dos almendras. Triture las almendras con el mortero hasta que den un polvo muy fino y mézclalo con la miel, luego añada una cucharadita de zumo de limón.

Aplíquelo suavemente en el rostro dándose masajes circulares y déjelo secar durante 15 minutos. Enjuágue con agua tibia. Se sentirá rejuvenecida.

Avena y suavidad

Es increíble lo suave que queda la piel después de utilizar esta mascarilla. La base es media taza de avena que debe licuar o machacar muy bien. Luego hay que agregar media cucharadita de miel de abejas, dos cucharadas de leche, dos gotas de aceite de geranio y dos gotas de aceite de manzanilla.

Revuelva bien y aplique esta pasta con sus dedos mediante masajes circulares. Déjela 15 minutos y retírela con agua tibia. Su piel quedará tan suave como la de un bebé. Puede añadirle a la mezcla 5 gotas de zumo de limón si tiene una piel grasa.

 

Mascarilla hidratante

 Frutas

Ciertas frutas son ideales para hidratar su piel debido a su alto contenido de agua. Utilice, por ejemplo, un plátano maduro y haga una pasta, la cual aplicará sobre su cara y el cuello suavemente. Espere 15 minutos y retire la mascarilla con agua fría para activar la circulación sanguínea.

Pepino

Ya conocemos las maravillosas propiedades del pepino: es delicioso, fresco e ideal para una dieta balanceada. Pues no se imagina los cambios que puede lograr en su piel, es perfecto, sobre todo si ha tomado demasiado sol en un día de playa.

Para hacer esta mascarilla solo pele un pepino y muélalo bien fino hasta obtener una pasta (no se olvide de guardar dos rodajitas para sus ojos), extiéndala por todo su rostro y descanse por 15 minutos. Retire con abundante agua fría y verá su piel fresca y humectada.

 

Mascarillas renovadoras contra arrugas y ojeras

 Rostro terso

Otra vez la miel y el huevo, una mezcla sin par para la belleza. Combine dos cucharadas de miel con una clara de huevo batida. Mezcle con una cucharada de zumo de limón y aplíquesela en el rostro, masajeando suavemente. Sentirá como su piel se estira.

Déjela durante 20 minutos y límpiese el rostro con leche descremada tibia. Una delicia de tratamiento.

Rosas y juventud

Pues sí, era cierto lo que contaban las mujeres en la antigüedad, algo tan efímero como una rosa conserva el secreto de la eterna juventud. ¿Desea probarlo? Pues triture los pétalos de cinco rosas frescas hasta hacer una pasta y déjela actuar en su rostro durante 15 minutos. Retírela con agua fría ¡Y verá los resultados!

 

Mascarillas contra el acné, las espinillas y las manchas

 Tomate

El tomate tiene variados efectos sobre la piel: hidratante, tensor y exfoliante. Si desea que esos molestos granitos y puntos negros desaparezcan, corte un tomate a la mitad y páselo por su rostro. Déjalo actuar durante 15 minutos y retírelo con agua tibia ¡Verá los resultados!

Limón

El limón es la fruta de los mil usos, ¡quién se iba a imaginar que también elimina las manchas! Pues bien, mezcle una cucharada de miel de abejas con otra de zumo de limón.

Aplíquela con un algodoncito en la piel del rostro y déjela durante 20 minutos. Retire la mascarilla con un algodoncito y agua mineral. Tenga cuidado de limpiarla bien, pues la exposición al sol de la piel con limón provoca manchas.

Credito
EL NUEVO DÍA

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