El señor Darío Fernando Mejía asegura que compró sobre planos en el 2012 dos apartamentos en el edificio Mirador de Belén, edificado por la constructora J&S limitada y, según él, debido a la demora en su entrega decidió venderlos ya que una de las escrituras le fue otorgada el año pasado y la otra hace dos meses pero su intención no se ha podido efectuar porque aún están a nombre de la constructora.

Mejía asegura que a pesar de esto, la constructora debe impuestos desde 2009 y no entiende cómo pudieron hacer la escrituración ante la notaría si se presenta dicha situación, por lo tanto interpuso la queja ante la Superintendencia de Industria y Comercio, de la cual aún espera una respuesta, al igual que a Impuestos municipales por la supuesta falta del recaudo.

Por su parte, Jhon Sánchez, ingeniero de la obra, asegura que a lo que ellos concierne han cancelado los impuestos respectivos y por eso lograron hacer la escrituración, pero, según él, en el 2013 se adquirió el reglamento de propiedad horizontal pero aún se cuenta con una sola matrícula inmobiliaria del lote y ficha de Predial.

El proceso sería con Registro de Instrumentos Públicos donde son enviadas las copias de la escrituras ya hechas a los compradores; luego ante el Instituto Geográfico Agustín Codazzi se desarrolla la subdivisión del lote y finalmente en Secretaría de Hacienda se realiza la modificación del impuesto al dueño del apartamento.

Según Sánchez, “el problema radica en que el Agustín Codazzi dice no tener el personal para realizar el levantamiento del lote y verificar que se requiere de 150 matrículas inmobiliarias, de las cuales 64 son apartamentos, 64 parqueaderos y 22 depósitos, y ya eso no es responsabilidad de nosotros”.

Por su parte, Mejía piensa demandar ante un juzgado la resolución de los contratos por incumplimiento, para que sea la constructora la que solucione su situación debido a que los procesos de venta de los apartamentos ya están en trámite y requiere con prontitud hacer entrega a su nuevo dueño.