El secretario de Salud, Gélver Dimas Gómez, aseguró que el plan está enfocado en mejorar la calidad del recurso hídrico que proveen los 32 acueductos a cerca de 700 habitantes. Y explicó que el agua mal tratada puede provocar hasta 200 enfermedades.
“La tarea está en lograr que estas instituciones que manejan los acueductos, diferentes al Ibal, intervengan para mejorar la prestación. Durante años, los acueductos han sido tomados por grupitos como poder político y no se preocupan por la calidad del agua”, aseguró Gómez.
Estos sistemas han ocasionado un agotamiento de las fuentes hídricas debido al mal manejo de las cuencas y a que no existe un control sobre el caudal ni sobre el consumo de los usuarios.
Gómez recordó que cada mes la Secretaría de Salud realiza labores de inspección y vigilancia en las instalaciones rurales y urbanas, que son administradas por el Ibal.
Dato
La Secretaría de Salud indicó que los acueductos comunitarios de la ciudad surten al 15 por ciento de la población ibaguereña.
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