Autoridades y la comunidad de por lo menos cuatro barrios al sur de Ibagué coincidieron en que desde hace más de 10 años no se registraba una situación como la que ocurrió en la madrugada de este jueves 23 de septiembre, en donde las fuertes lluvias en la cuenca alta y media del Cañón del Combeima generaron el aumento del caudal y el desbordamiento del río Combeima, inundando varias viviendas construidas en la ribera del afluente. 

Según informó el mayor de la Defensa Civil, en el Consejo municipal del Riesgo se determinó que se afectaron alrededor de 70 viviendas; 30 con pérdida total y 40 con pérdidas parciales.

La fuerza del río arrasó con casas, muros y vehículos, y no le dio tiempo a varios grupos de familias de salvaguardar sus enseres, quienes en medio del temor, la lluvia y la oscuridad salieron de sus hogares a la madrugada solo con lo llevaban puesto, la situación también generó la evacuación de más de 200 personas, aunque por fortuna no representó la pérdida de vidas humanas.

La emergencia causó afectaciones en barrios como el Baltazar, Industrial, Matallana, Santofimio, Palmar, Avenida, Yuldaima, San José, Cartagena, La Isla, Uribe Uribe, El Bosque y Cámbulos, así como en varios puntos del Cañón del Combeima.

Ayer en horas de la mañana, aunque en la zona urbana no se presentaban lluvias, la fuerza del río Combeima seguía generando pánico en varios habitantes, quienes como podían intentaban sacar algunos enseres y electrodomésticos, antes de que la situación empeorara o de que se volvieran a registrar fuertes precipitaciones.

En horas de la tarde, el llamado de los organismos de socorro seguía siendo el de evacuar residentes de las zonas de riesgo.

“Hicimos un recorrido por el sector desde la parte de abajo de El Totumo hacia el corregimiento Juntas y todavía (sobre las 4 de la tarde de ayer) continua el río arrastrando piedras y material y con un olor a lodo”, reseñó el mayor Vélez. 

La emergencia 

Según relataron algunos vecinos, la emergencia se empezó a registrar sobre la 1 de la mañana con fuertes lluvias y olor a lodo, sobre las 4 de la mañana recibieron el llamado de las entidades de atención del riesgo y líderes comunales que les pidieron evacuar. 

“Me levanto y con el megáfono empiezo a decirle a la gente que evacue, ellos se van del sector y en contados minutos empieza el río a entrar, ya sobre las 7 de la mañana se mete el río al barrio y se lleva las cosas de la gente”, dijo Anderson Olaya, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Baltazar.

A su vez, Ramiro Bedoya, presidente de la JAC del barrio Santofimio, acotó que estuvo en alerta sobre las 11 de la noche del miércoles, tras el aviso de los radioperadores del Cañón del Combeima.

“Aquí tenemos una piedra que tiene aproximadamente 4 metros de altura, cuando el río supera eso, empezamos a evacuar la comunidad, sobre todo quienes están a la orilla del río”, señaló Bedoya.

En el barrio Santofimio la fuerza del agua se llevó cuatro viviendas y afectó a otras 15 construidas a la orilla del río. 

“Salí corriendo y todas mis cositas quedaron ahí”, sostuvo una ciudadana del sector, quien dijo que siguen pendientes de una reubicación, porque no tienen a donde irse. 

Alerta amarilla

Tras la emergencia en Ibagué se convocó un consejo extraordinario de gestión del riesgo, en donde se declaró la calamidad pública y la alerta amarilla en la capital del Tolima, esto con la intención de estar preparados ante cualquier calamidad que se pueda registrar. Asimismo, se fijó de forma permanente la sesión del consejo municipal de gestión del riesgo. 

El secretario de Ambiente y Gestión del Riesgo, César Gutiérrez, indicó que: “estamos en una situación en la que ningún ciudadano y ninguna administración quisiera estar atendiendo, una situación de emergencia (...), se presentaron precipitaciones muy importantes en la cuenca alta y media del río Combeima y desencadenó en que se tuviera un efecto que hace más de 20 o 15 años no se había realizado, que se saliera de su cauce en el área urbana”, dijo Gutiérrez.

El funcionario insistió a la ciudadanía para que evite que por necesidad se terminen construyendo viviendas en zonas de alto riesgo, “la invitación a los ciudadanos es que seamos conscientes de esto, hoy se presentó una situación crítica, pero es posible que se siga presentando”, sostuvo. 

El secretario de Gobierno Óscar Berbeo, sostuvo que desde tempranas horas se dispuso de varios miembros de la Fuerza Pública para que vigile y brinde seguridad, si por razones de fuerza mayor deban abandonar sus predios  

Piden ayudas

Tras las afectaciones, cientos de personas quedaron sin donde pasar la noche, por lo que aprovecharon la presencia de EL NUEVO DÍA para hacer un llamado especial a la Administración municipal, con el fin de que les brinde apoyo frente a la situación que afrontan. 

“Estas personas otra vez quedaron en el limbo, el río hizo estragos y de nuevo necesitan ayudas, se quedaron con lo que tienen puesto, son cerca de 50 familias en el Baltazar en donde hay niños, le da a uno pesar ver cómo queda el barrio, esta es la tercera vez este año que nos ocurre eso”, dijo Anderson Olaya, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Baltazar.

Ayer en horas de la tarde la Alcaldía llegó con las primeras ayudas humanitarias en donde dispusieron de colchonetas, útiles de aseo y mercados. 

Asimismo, en el barrio Industrial se dispuso de atención psicosocial para 80 personas; mujeres lactantes, adultos mayores, personas con discapacidad y niños. 

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