Según el Comité de Ganaderos del Tolima, no hay ningún municipio que se escape del abigeato, ya que se ha vuelto constante en los últimos meses que grupos organizados entren en dos o tres camiones a las fincas, secuestren a sus habitantes y se lleven los bovinos.

Cabe recordar que el último caso reportado fue finalizando 2014 en San Luis: en esa ocasión, una ganadera del sector perdió en el hurto el fruto del trabajo realizado por 20 años.

Carlos Gustavo Silva, gerente del Comité, coincide con José Félix Lafaurie, presidente Ejecutivo de Fedegán, en que la justicia continúa siendo flexible en el tema, motivo por el cual las víctimas de los hurtos de ganado ya no denuncian.

Ambos directivos consideran importante la revisión de las leyes actuales, ya que el caso solo toma relevancia cuando cumple la mínima cuantía, esto quiere decir que es equivalente o supera los dos millones de pesos, de lo contrario el tema pasa a segundo plano.

Para contrarrestar esta crisis, Silva propone a los ganaderos del Tolima organizarse, como se ha hecho en la zona de Flandes, Girardot y el Alto Magdalena, a través de la Red de Cooperantes del Alto Magdalena.

La importancia de esta estrategia de seguridad radica en mantener comunicación continua entre los ciudadanos y la Fuerza Pública, de esta manera los cooperantes informan oportunamente acerca de situaciones sospechosas como vehículos o personas que estén transitando o deambulando con suspicacia.

Panorama nacional

Con una invitación al Ministerio de Defensa para que visite Bolívar y conozca de primera mano los casos de hurto de ganado que se están presentando en esa zona del país, Lafaurie busca que este tema sea tomado en serio y “deje de pasar de agache”, ya que considera que este tipo de acciones ilegales son la puerta hacia actos como el secuestro.

Los ganaderos, por su parte, deben enfrentar esta situación, que acompañada de las extorsiones se ha convertido en una de las mayores dificultades de este sector, lo que genera constantemente altas pérdidas económicas en el sector rural.