Aunque los costos para producir una hectárea de arroz aumentaron entre 2015 y en la actualidad los arroceros del Tolima continuarán recibiendo el mismo dinero por carga de arroz que hace un año.

El encargado de entregar la mala noticia fue el gerente General, Rafael Hernández, quien estuvo presente ayer en un día de campo adelantado en las haciendas Calicanto y El Chaco, ubicadas en la meseta de Ibagué.

El taller fue una de las actividades del Comité anual organizado por el Fondo Latinoamericano de Arroz Riego (Flar), del cual Fedearroz es miembro y al que asistieron delegados de más de 10 naciones productoras.

Precios bajos

Hernández afirmó que la industria no acogió la propuesta del gremio de incrementar en un seis por ciento el valor de la carga de arroz, que corresponde a la inflación de 2015.

Peor aún, el Ejecutivo dijo que la industria no aceptó los mismos precios del año pasado, y antes los redujo en un 3.5 por ciento.

“Es una condición que me parece injusta, y me parece que la gran industria ha hecho gala de su posición dominante y ha impuesto el precio que quiso.

En efecto, Molinos ROA, Diana Corporación S.A. y Molino Flor Huila, todas juntas, controlan al menos el 50 por ciento del mercado de arroz blanco empaquetado en el país.

El Gerente de Fedearroz dijo que tanto el gremio como los productores no ven una razón para establecer un rango de precios tan bajo, y que debieron aceptar lo “a regañadientes”.

De acuerdo con Hernández, en Tolima la carga de arroz se está pagando a un promedio superior a los 143 mil pesos, mientras que en los llanos orientales se cotiza en 126 mil pesos.

Taller con potencial

De los talleres de la Flar adelantados en los comités que tienen lugar cada año en distintos países miembros del Fondo, surgen las futuras variedades que usarán los arroceros de Latinoamérica.

Durante la actividad adelantada en la hacienda Calicanto, los visitantes extranjeros pudieron conocer variedades de distinto tipo y calidad en un lote experimental que fue caracterizado mediante un mapa.

Personal de Fedearroz expuso las tecnologías aplicadas, y sus características conocidas a partir de la información recolectada mediante el uso de sensores de rendimientos entre otros dispositivos.

César Moquete, representante de Genarroz, firma de República Dominicana dedicada a la generación de variedades de arroz, dijo que le llamó la atención los medidores de agua instalados en el lote, con los que se mide cuánta cantidad de agua ingresa al terreno y cuánta sale de manera posterior.

“Es muy importante porque en mi país no tenemos esos sensores y pienso que es una tecnología que debemos de implementar”, dijo el dominicano.