El propósito de la moderna doble calzada que se construye entre la avenida Pedro Tafur y el aeropuerto Perales podría quedar en el aire, debido a la ubicación de las vías de acceso a la nueva terminal aérea.

Las vías de ingreso y salida a la nueva terminal fueron planteadas -y construidas- con conexión a la calle 145, la variante que comunica el sector de Picaleña (Suroriente) con El Salado (Nororiente).

Este diseño contrasta con lo planeado por los promotores de la nueva carretera que construye el Instituto Nacional de Vías (Invías), y que, se pensaba, conectaría de manera directa sus dos calzadas con el Aeropuerto.

Además de estar desconectados de esta nueva vía, los accesos construidos obligarían a todos los conductores que salgan de la nueva terminal a emprender un rodeo por la calle 145 hasta la glorieta de El Salado y regresar por la misma variante, si es que desean tomar la nueva doble calzada con dirección a la avenida Pedro Tafur.

El recorrido sería de alrededor de seis kilómetros, una distancia equivalente a la que existe entre el estadio Manuel Murillo Toro y la plaza de El Jardín.

Más allá de lo inconveniente y molesto que pueda resultar para los conductores esta situación, lo que preocupa es la pertinencia que tendría la construcción de la doble calzada, en la que se están invirtiendo 21 mil 445 millones de pesos.

EL NUEVO DÍA indagó y trasladó esta inquietud desde diciembre de 2016 al tolimense Alfredo Bocanegra, director de la Aeronáutica Civil, pero debido a sus ocupaciones no se recibió respuesta.

Entonces, fue consultada la secretaria de Infraestructura del Municipio, Sandra Rubio, quien afirmó que los diseños concernientes al Aeropuerto estaban a cargo y son responsabilidad de la Aerocivil.

Sin embargo, una fuente que ha hecho seguimiento al proyecto de remodelación del Aeropuerto y que pidió la reserva de su identidad argumentó que no se pudo construir la segunda calzada junto a la actual vía porque no fue posible la consecución de un lote ubicado al lado del Aeropuerto.

Según informó, no se logró llegar a algún acuerdo de compra con el propietario del terreno, lo que obligó a modificar los diseños de los accesos a la terminal aérea.

Asimismo, la fuente dijo que luego de ser modificados los diseños se planteó la construcción de un retorno (intersección) en la calle 145, con el objetivo de que los conductores pudieran devolverse hasta la doble calzada que se construye.

No obstante, dijo que no fue posible, porque esto supondría un incremento en los costos del contrato y, además, se debía obtener los permisos para modificar una vía nacional a cargo de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), y ese proceso “resultaría complicado”.

Cabe resaltar que esta versión no ha podido ser confirmada con la Aerocivil, entidad responsable de la terminal aérea.

“No se puede improvisar”

Javier Arbeláez, arquitecto y uno de los promotores de la nueva doble calzada, opinó que en el diseño de los accesos al nuevo aeropuerto “no se puede improvisar los accesos”.

El exsecretario de Planeación municipal dijo que en la última visita de Bocanegra a Ibagué en noviembre de 2016, planteó la misma inquietud a representantes de la Aerocivil, quienes le confirmaron que la construcción de un intercambiador a desnivel en la calle 145 se había analizado, pero no se aprobó por el aumento en los costos del contrato de la terminal. Sin embargo, contó Arbeláez, le indicaron que la Aerocivil revisaría la posibilidad de habilitar la actual carretera que conecta al Aeropuerto como una vía de salida para los conductores interesados en tomar la doble calzada y evitar el recorrido hasta El Salado.

No obstante, el arquitecto reconoció que esta alternativa no ha sido ratificada de manera oficial por la Aerocivil ni está en planos siquiera, dijo que existe “incertidumbre”, por lo que efectuó un llamado para que desde ya se proponga como opción viable y no se defina después de que sea terminado el proyecto.

“Creo que no es conveniente y espero que no se vaya a dejar así (...), alargaría los recorridos considerablemente y subutilizaría uno de los propósitos más importantes de lo que configuramos como entrada y acceso a la nueva terminal (...)”.

Y agregó que “tenemos que hacer un aeropuerto con todos los accesos con una resolución y con una categoría que nos ayude a que no sean laberintos, y que tengamos que encontrar la salida y que mucho menos vayamos a improvisar y a impactar la vías existentes”.

Por último, dijo que las vías de acceso y las obras complementarias en las carreteras cercanas son tan importantes como la misma terminal.

Dato

Más de 46 mil 780 millones de pesos son invertidos en la remodelación del aeropuerto Perales, a cargo del Consorcio Los Andes.