“El sector cafetero volverá a ser uno de los grandes motores de la economía”, Roberto Vélez Vallejo

Roberto Vélez Vallejo, gerente General de la Federación Nacional de Cafeteros.
Crédito: COLPRENSA - EL NUEVO DÍA
El Gerente General de la Federación Nacional de Cafeteros,aseguró que el precio del café está pasando por uno de los mejores momentos de la historia, lo que llevará a que el sector vuelva a ser importante para la economía nacional, pese a los retos por el Covid-19.
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El aumento del precio del dólar en Colombia, que hoy ronda los 4000 pesos, y la solicitud del café colombiano en los mercados internacionales, están llevando al sector caficultor a vivir épocas de antaño, en los que era uno de los principales motores de la economía nacional y lo cual quiere repetir este año en medio de una difícil situación del país a costillas del Covid-19.

Así lo dejó ver el gerente general de la Federación Nacional de Cafeteros, Roberto Vélez Vallejo, en entrevista con Colprensa, al manifestar que pese a la incertidumbre y los retos que ha traído el Covid-19 para la recolección de la cosecha del primer semestre, el sector es uno de los que mejor perspectiva tiene desde el punto de vista económico para este año.

Por eso, el dirigente explicó cuáles son las medidas que se vienen implementando para la recolección de la cosecha, que representa cerca de 6,5 millones de sacos, y las solicitudes que le hacen al Gobierno Nacional y a los gobiernos locales, para poder darle un impulso a la economía en medio de las complicaciones que trae el aislamiento obligatorio que dificulta la movilidad.

- ¿Cómo le ha ido al sector en medio de esta emergencia que está viviendo el país a causa del Covid-19?

Yo definiría lo que está pasando en el sector con dos palabras: incertidumbre y retos. La primera, porque estamos ad portas de empezar a recolectar la cosecha, tenemos el mejor precio en términos corrientes de la historia y uno de los mejores en términos constantes de los últimos 30 años, pero tenemos el reto de la recolección y del comercio mismo del producto, porque están las restricciones de movilidad en este momento. Tradicionalmente el café se recoge con un contingente que va por toda la región cafetera, desde diferentes departamentos, y eso, dadas las circunstancias, hoy no es posible.

Entonces, el mayor reto es cómo recoger el café y venimos trabajando intensamente en todos los frentes. Primero, arrancamos con un protocolo de sanidad, porque tenemos que tener la salud de las zonas cafeteras como la primera prioridad y la salud de los productores; segundo, la coordinación a nivel nacional, departamental y municipal con alcaldes, gobernadores, ministros de Agricultura, Salud, del Interior, la Policía; y, tercero, tenemos que mirar cómo hacemos para que una vez recolectemos el café podamos ingresar el producto a los centros de compra. Hay muchos alcaldes que se han tomado más atribuciones de las que pueden, impidiendo la entrada a los municipios, y tenemos que tratar de convencerlos de que el café es tal vez la alternativa económica más clara que tienen.

- La recolección de la cosecha del primer semestre representa cerca de 6,5 millones de sacos. ¿Qué medidas y qué protocolos se están siguiendo para lograr el objetivo?

Hemos venido hablando muy claro con el Gobierno Nacional y entiende la angustia, pero también hay muchas restricciones que hoy impiden que haya una movilidad interdepartamental e intermunicipal, por lo que nosotros hemos venido tratando de ingeniarnos cómo podemos ayudar a la recolección.

Lo primero que se nos ha ocurrido, y que ya lo estamos montando en varios municipios cafeteros, son unas bolsas de empleo para que la gente del mismo lugar, del mismo municipio, donde no hay ni un solo caso del Covid-19 y que se quedaron sin empleo porque se apagaron sus empleos, nos acompañe inscribiéndose allí, para que los cafeteros puedan recurrir a esa mano de obra.

Por ejemplo, en el municipio de Belén de Umbría, en Risaralda, hay más de 100 mototaxistas que están inscritos en la bolsa de empleo y están sirviendo de apoyo a la actividad de recolección de café y otros productos agrícolas. La idea es promoverlo en todos los municipios. Vamos a ver que podemos coordinar con los gobernadores y alcaldes para seguir avanzando en ese tema.

- Con todas estas dificultades de movilidad para la recolección, ¿usted cree que se va a afectar la recolección de la cosecha?

Nosotros tenemos dos épocas: una que se llama la cosecha y otra la mitaca, que es una cosecha más pequeña, de 20 % a 30 %. En este caso, los departamentos del sur del país, Nariño, Cauca, Norte del Huila y parte de Cundinamarca están en cosecha, mientras que los del centro del país, que llamamos el Eje Cafetero, están en mitaca. Los del sur son una caficultura más pequeña, donde el cafetero tiene menos de cinco hectáreas y nosotros tenemos que con la mano de obra familiar y con gente cercana se puede recolectar el café sin ningún inconveniente. El problema está en el centro del país, donde hay caficultura de mayor formato.

Ahí estamos y hemos estado promoviendo la opción de la tecnología que habíamos lanzado hace dos años, que son las lonas para dejar caer el café, que aumentan la eficiencia, donde el recolector simplemente deja caer el café maduro y al final jala las lonas que están por debajo de los cafetales y eso aumenta la eficiencia de la recolección. La segunda, la derribadora, que es el acompañamiento tecnológico mediante el cual con una división el café maduro va cayendo a las lonas y se aumenta la productividad de la recolección en un 35 %.

- ¿Ya hay empresarios del sector que se están viendo afectados desde el punto de vista económico?

Si. La caficultora de formato grande es la que tiene más problemas. Ellos ahora tienen el problema de la recolección y ahí viene un reto grande. Pero hay otro tipo de retos, los poquitos recolectores que hay se tienen que quedar en las fincas, entre lo que nosotros llamamos barracas, por lo que hay que adecuarlas para que puedan estar sanitariamente dentro de los protocolos de salud que hemos lanzado. También está el tema del dinero, cómo pagarle a estos señores. Realmente no es fácil, estamos llenos de retos, pero queremos y creemos que somos capaces de sobreponernos y recolectar el café y darle a la economía colombiana el empujón que necesita hoy dé cuenta nuevamente de la caficultura.

- Este es un sector que en este momento se ha mostrado como una alternativa fuerte para impulsar la economía este año. ¿Lo podrán lograr?

Yo no tengo la menor duda. Si uno tuviera que escoger en Colombia cuál es el sector que tiene la mejor perspectiva desde el punto de vista económico, tiene que ser la caficultura. Por eso es importante decirle a los alcaldes que necesitamos tomar todas las medidas de protección, pero tenemos también que ver cómo le damos la posibilidad al café para fluir, de manera que esos 603 municipios que viven del café se vean beneficiados con una mejor cosecha y los mejores precios de la historia, para poder irrigar esas platas en las economías locales y que tengamos cuando salgamos de este enclaustramiento unas economías sólidas para poder seguir hacia adelante.

Roberto Vélez Vallejo, gerente General de la Federación Nacional de Cafeteros.

- ¿Cuáles son las razones que tienen al sector gozando de un buen momento, después de tantos inconvenientes que han tenido en los últimos años?

El precio internacional no está en nada del otro mundo, hoy la bolsa de Nueva York está a un nivel de 1,10 dólares, lo que ha venido favoreciendo el precio nacional viene por la diferencia que le pagan al café colombiano, que tradicionalmente son 2 o 4 centavos, y hoy es 50, producto de la falta de café de Centroamérica, ya que debido a los precios de los últimos dos o tres años se ha venido marchitando su producción, entonces están pagando 50 centavos por encima de ese 1,10 de la bolsa y eso multiplicado por un dólar de 4000 pesos, pues nos da un precio interno cercano a 1.200.000 pesos, que vuelvo y repito son unos precios históricos para la carga de café.

- ¿Eso quiere decir que la caficultura este año tendrá un papel destacado dentro de la economía?

Yo creo que sí, vuelve el café y se echa al hombro la economía colombiana, con lo que el sector cafetero volverá a ser uno de los grandes motores de la economía.

- ¿Cómo han visto la respuesta del Gobierno para intentar contener el brote del virus en el país?

Como todos los colombianos, total apoyo al presidente en este sentido, total respaldo al gobierno y acompañamiento. Sabemos que eso es lo que hay que hacer, nos incomoda muchas veces, nos pone todos los retos que hemos venido hablando, pero sabemos también que es lo correcto.

- ¿Qué piensen específicamente frente a los incentivos lanzados por el Gobierno Nacional para el alivio del sector caficultor en medio de la emergencia?

El más claro es el incentivo al crédito, pero estamos esperando todavía que ese incentivo baje a nivel del productor. Aquí hay un tema muy claro y es que se hacen anuncios, pero mientras los dineros fluyen de los bancos y el cafetero puede acceder a un crédito de estos, pasa su tiempo.

Hemos estado hablando con el Gobierno en temas para ser comprensivos, ya que los bancos no pueden pedir los mismos papeles, porque hoy el cafetero no tiene cómo ir a buscar la firma del fiador y todo ese tipo de cosas que tradicionalmente requiere un préstamos por el aislamiento. Entonces no ha sido fácil que fluyan los créditos hacia los cafeteros, pero hoy yo le he dicho al sector: tenemos que estar dispuestos a que somos nosotros los que hagamos las cosas, somos un sector que tiene más que dar y en eso estamos.

- ¿Le están solicitando algo especial al Gobierno, teniendo en cuenta los retos que vienen para la recolección de la cosecha?

El Gobierno tiene muy claro el foco y nosotros hemos venido acompañando las decisiones del presidente Iván Duque, porque creemos que está haciendo lo correcto para enfrentar esta crisis. Lo que queremos es contribuir y ver cómo entre nosotros mismos somos capaces de crear una solución para hacer la recolección del café.

 

Alerta por niveles de broca

El gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, Roberto Vélez Vallejo, explicó que la alerta que se generó la semana pasada en torno a la evidencia de unos altos niveles de broca no representan mayor afectación en este momento, pero que sí es un llamado a los productores para que se mantengan con los ojos bien abiertos frente a este tema.

“Tradicionalmente los niveles de broca que veníamos manejando estaban en 2 % o 2,5 % del café y hoy estamos viendo un nivel cercano al 6 %, por eso alertamos al productor”, señaló el directivo, al explicar que la principal explicación viene de dos temas en particular:

“En primer lugar tiene que ver con un marzo más caliente de lo normal o más seco y eso ayuda a la consolidación de la broca. La otra parte es la falta de movilidad de mano de obra, ha estado muy quieta, entonces hay mayor infección, pero digamos que no es una cosa preocupante”, manifestó Vélez Vallejo.

Credito
EL NUEVO DÍA

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