Desde el primero de septiembre, las empresas que realizan actividades de administración empresarial, consultoría y jurídicas, las de administración pública y defensa, los comercios de alimentos, bebidas, víveres, jabón y papelería y los distribuidores minoristas de combustibles, lubricantes y aditivos, están obligadas a utilizar la factura electrónica.

De esta forma, se cumple un hito más del calendario de obligados establecido con la entrada en vigor de la Resolución 000042, del pasado 5 de mayo, cuyo objetivo es conseguir una implementación paulatina y eficiente en la adopción de la factura electrónica. No obstante, tal como se establece en la Resolución, desde el pasado 15 de junio, cualquier empresa, independiente del grupo al que pertenezca, puede darse de alta como facturador electrónico.

El 50% de los obligados ya están habilitados

“La masificación de la factura electrónica se está realizando sin grandes sobresaltos – comenta Alberto Redondo, CMO de Seres para Iberia y Latam – Los últimos datos confirman el éxito de la estrategia desarrollada en los últimos años por la DIAN”.

Según los últimos datos facilitados por la Dirección de Impuesto y Aduanas Nacionales (DIAN), el 49,3% de las 360.000 entidades obligadas a adoptar la factura electrónica, ya se encuentran habilitadas para facturar electrónicamente.

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