Los rumores que se habían generado el martes por la presunta renuncia por motivos de cansancio de Humberto ‘Tucho’ Ortiz al cargo de director de las Divisiones Menores del Deportes Tolima es un hecho.

El antioqueño decidió regresar a su tierra natal, pues ve en este nuevo cargo la oportunidad de seguir trabajando con jugadores jóvenes y de tener más cerca a toda su familia, que según él, no la ha podido disfrutar en los últimos 30 años.

En diálogo con EL NUEVO DÍA, ‘Tucho’ habló sobre sus motivos de abandonar la institución, recordó los momentos vividos y sobre el actual momento del club.

¿Por qué renunció a su cargo en el Tolima?

Lo hice porque ya llevo 34 años de mi vida dando vueltas lejos de mi familia, de la casa y llegó una oferta para trabajar con el Medellín, hablé con don Gabriel (Camargo) y le dije que yo ya tengo una edad grande, hemos trabajado muy bien, sabroso, cultivamos una buena amistad, pero ya llegó el momento en el que es importante estar con los míos también.

¿Qué le dijo Gabriel Camargo cuando le comentó su salida?

Se puso muy triste, pero después comprendió que era una necesidad mía; como le digo, hacía cinco meses había recibido una propuesta de Nacional, pero la había desechado porque tomé la decisión más por afecto a la institución y a don Gabriel (de quedarse).

¿Se siente culpable y señalado por la actual situación del Tolima?

Eso es lo normal, hablaron cuando el equipo tuvo seis años de bonanza, siempre primero en reclasificación, eso es parte del fútbol y cuando las cosas no se dan, tienen que buscar culpables. En la vida hay errores y aciertos y en el fútbol pasa igual.

Por lo que expresa, ¿se erró en la contratación de los refuerzos?

Pues los resultados lo están mostrando de que...(silencio) eso es un contexto muy grande, no entremos a profundizarlo en este momento porque es echarle candela a eso. De todas maneras cuando los cosas no se dan, se deben tratar esos temas internamente en el club.

Eso que se dice de usted lo cansó para seguir en el Tolima...

Eso es una parte. Con Tolima no tengo sino agradecimientos. Trabajé desde el 94 con el club. Me encontré con una gran persona (Gabriel Camargo) y yo respeto mucho a los que invierten en el fútbol, porque lo hacen pensando en el bienestar, ya que el deporte es salud, recreación, tristeza y alegría.

¿Está abandonando el barco cuando se está hundiendo?

No, la salida mía es porque con la edad que tengo (77 años), sin mandar una hoja de vida a ninguna parte, y tener dos propuestas de clubes con la importancia de Nacional y Medellín es una distinción, me siento un afortunado del fútbol.

Además, hay una serie de factores de peso como es estar nuevamente en mi tierra, mi señora tiene 79 años y me hace falta el afecto familiar. Esta posibilidad no se me presentará más y por eso debo aprovecharla.

¿Quién sería su sucesor como director de las divisiones menores?

Yo dejé gente importante en el club, nosotros le apostamos a los técnicos de la región y nos han dado buenos resultados. En este momento el técnico tolimense está bien posicionado y hay que creer en la gente que sigue.

Dejo las divisiones inferiores que acaba de ser campeona (Campeonato Juvenil Sub20); este año tiene una nómina como para repetir título. Hay una persona que traje (Fabio Martínez) e hizo un gran trabajo con esos muchachos.

Fabio Martínez sería su reemplazo....

Esos conceptos los evalúo mucho internamente, aunque esa es una muy buena posibilidad, pero eso ya no me compete a mí, sino a la Junta Directiva.

¿Hasta qué día trabaja con el Tolima?

Mi labor termina a finales de marzo, en estos días me reuniré con los profesores, haremos el empalme correspondiente porque debo viajar a Medellín el primero de abril. Mi trabajo allá será muy similar al que realicé aquí.

¿Qué se debe hacer para que el Tolima salga de esta situación?

Hay que mirar cosas internas que se tienen que revisar pero no las ventilaré públicamente. Se debe revisar meticulosamente lo que ha pasado: Este año la apuesta fue a la juventud pero la afición, que está llena de pasión, no lo admite.

Tolima fue durante seis años el equipo número uno en reclasificación y si los torneos hubieran sido largos como en Europa, tendríamos como seis coronas más, luego llegan los momentos difíciles y ahora hay que tener cordura, tranquilidad, hacer los correctivos con buen criterio, sin desesperarse para que vuelva a ser protagonista.

¿Falta una figura en el equipo como lo fue Charria, Medina o Marrugo para salir adelante?

En la actual situación, Tolima nunca podrá tener jugadores importantes porque valen mucha plata y eso hace que se dificulte mucho contratar futbolistas.

La labor que yo hacía era recomendar y comprar barato para que después salga bueno. Eso sucedió con el Rifle (Andrés Andrade), (Yimmi) Chará, (Cristian) Marrugo, Gonzalo Martínez, (Iván) ‘Champeta’ Velásquez, entre otros.

¿Qué llamado hace a los hinchas del equipo?

Hago un pedido grande para que Tolima siga teniendo fútbol profesional. Cuando yo subí a Tuluá en el 93, ese año descendió Tolima y tenía mucha alegría por el logro conseguido, pero la tristeza que noté en una ciudad futbolera como Ibagué fue grande y eso no puede suceder más, tenemos que mantener un equipo sin descenso y ocupando las primeras posiciones.

¿Es partidario de que continúe Carlos Castro como técnico?

Públicamente no hablo sobre eso, porque tengo un respeto grande por el entrenador y he vivido esa situación. Ahora esa decisión la tomarán otros. Aprecio y valoro mucho a Carlos Castro porque fue mi jugador.

Lo sacó de la B

Humberto ‘Tucho’ Ortiz llegó al Deportes Tolima en 1994 con la convicción de regresarlo nuevamente a la Primera División, tras la pérdida de la categoría un año anterior. El antioqueño conformó un grupo de jugadores importantes y cabalgó durante todo el torneo consiguiendo el anhelado ascenso a falta de una jornada con una anotación de Hugo ‘Vallenato’ Arrieta. Desde entonces, ‘Tucho’ se enfocó en las divisiones menores y al mismo tiempo fue ojeador en Colombia. Algunos futbolistas que figuraron en el Vinotinto y oro fueron Yulian Anchico, los hermanos Daniel y Óscar Briceño, Carlos Darwin Quintero, entre otros.