Un día cualquiera, durante un entrenamiento común y corriente del Deportes Tolima en el estadio Manuel Murillo Toro, hace un par de temporadas, un hincha que observaba la práctica dijo con un tono irónico, pero no de manera despectiva, sino más bien con sentido de humor: “primero se marchará Gabriel Camargo del equipo, que el guardameta Janer Serpa”.

Y así muchos más seguidores, algunos admiradores del portero, y otros no tanto, también lo creían, debido a que año tras año, a pesar que el barranquillero no lograba afianzarse en la titular, nunca mostraba interés por marcharse de ‘La Tribu’.

No obstante, el pasado fin de semana se hizo oficial su renuncia, la cual se venía especulando desde hace varias semanas, luego de pedir un permiso para dejar la concentración ‘Pijao’ temporalmente, debido al grave estado de salud de su padre, don Víctor, afectado por una neuropatía (enfermedad del sistema nervioso).

Se fue agradecido

En diálogo con el portal web El Rincón del Vinotinto, Serpa prefirió hablar poco sobre la situación de su papá, pero sí se refirió a su despedida de la escuadra ‘Musical’, con la cual fue campeón de la Copa Postobón 2014 y, además, se quedó con el subtítulo de la Liga 2010-I.

“Quiero estar al lado de él para pasar los últimos días de su vida, o de mi vida, porque la verdad quiero tenerlo mucho tiempo más a mi lado”, sostuvo Janer respecto a su ‘viejo’.

Y sobre la decisión de colgar los guantes a sus 35 años de edad, refirió: “dejar a un lado el fútbol ha sido algo muy fuerte para mí, y mucho más el Deportes Tolima, porque ahí dejé parte de mi vida.

A aquellos seguidores que sé que son muchos y que siempre están con el club en las buenas y en las malas, y los que me apoyaron, les ofrezco miles y miles de agradecimientos. Sentí ese aprecio tan grande que me brindaron, los llevaré siempre en el corazón”, manifestó a El Rincón.

Desea regresar

El vínculo contractual entre Deportes Tolima y Janer Serpa llegó a su fin, pero la relación afectiva entre ambos aún no culmina, motivo por el cual el deportista sueña con regresar, pero con el objetivo de laborar detrás del arco.

“Me voy a preparar, mi sueño es ser el entrenador de arqueros del equipo. Claro, todo sería a su debido tiempo, respetando el trabajo de Eddy Villarraga. Lo que digo es a futuro.

“Puedo ser barranquillero, pero siento y llevo mi sangre ‘Vinotinto’ y mi corazón de ‘Oro’. Por siempre seguiré siendo hincha de mi equipo del alma, el Deportes Tolima”, puntualizó el ahora exguardameta.