La Copa Mundial de la FIFA Rusia-2018 llegó a su final en Moscú y con el título que adjudicó a Francia como campeón, cuatro distinciones individuales también fueron entregadas para destacar la labor individual de los que más brillaron en Rusia.

Con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, junto con el presidente de la FIFA, Gianni Infantino y los mandatarios de Francia y Croacia, Emmanuel Macron y Kolinda Grabar-Kitarovic; se cumplió la ceremonia de premiación en el estadio Luzhniki de Moscú, bajo un intenso aguacero.

El primer premio que fue entregado lo recibió la nueva joya del fútbol mundial, el francés Kylian Mbappé, elegido como el Mejor Jugador Joven del Mundial, gracias a sus cuatro goles en Rusia; frente a Perú, un doblete contra Argentina y el cuarto de la final, que sentenció el título francés.

Luego vino el podio a los Mejores Jugadores del Mundial, con tercer lugar para el francés Antoine Griezmann, segundo lugar para el belga Eden Hazard y primer lugar para el croata Luka Modric, quien se fundió en un abrazo con la presidenta de su país, protagonista en los días previos a la final por sus demostraciones de afecto a la Selección de Croacia.

La tercera distinción individual de la noche fue para el Guante de Oro, que fue dado al arquero de Bélgica, Thibaut Courtois, quien no estuvo presente en la ceremonia porque en la víspera se había asegurado el tercer lugar con su selección en San Petersburgo contra Inglaterra.

Justamente Inglaterra fue el protagonista de la siguiente mención, porque Harry Kane, con seis anotaciones, se quedó con la Bota de Oro al goleador del torneo, seguido por tres delanteros que festejaron cuatro veces cada uno: el belga Romelu Lukaku, el ruso Denis Cherishev y el francés Antoine Griezmann.

Finalmente, el premio que hace cuatro años recibió la Selección Colombia por el Fair Play, en esta edición del Mundial fue entregado a la Selección de España, la que acumuló menos faltas, tarjetas amarillas y ninguna roja durante sus cuatro partidos en la cita orbital.

Sigue la ‘maldición’

Hay registros que marcan la historia de maldiciones en el fútbol y el arquero croata Danijel Subasic confirmó una que recae sobre el club Mónaco, justamente de Francia, pues el portero de la Selección de Croacia se convirtió en el cuarto consecutivo que juega en este equipo y pierde una final del Mundial.

La Copa Mundial de la FIFA Rusia-2018 dejó muchos datos para los libros de historia, pero Subasic agregó un dato bien particular, porque al perder la final en Moscú se unió al francés Fabien Barthez, al holandés Maarten Stekelenburg y al argentino Sergio Romero en esta maldición del Principado.

El que inició la racha fue justamente un francés, el histórico Fabien Barthez, quien tras levantar el trofeo de campeón de 1998 con su país, llegó al Mundial de Alemania-2006 en el ocaso de su carrera deportiva, actuando para el Mónaco y con su país llegó a la final, pero la perdió contra Italia, por la vía de los penales.

El segundo llegó en Sudáfrica-2010, cita que tuvo como protagonistas de la final a España y Holanda. Los españoles se impusieron 1-0 con gol de Andrés Iniesta en el alargue y el portero de los Países Bajos era Maarten Stekelenburg, quien luego pasaría al Mónaco francés, aunque en ese momento jugaba en el Ajax de su país.

Hace cuatro años, en la cita de Brasil-2014, el campeón fue Alemania, tras vencer 1-0, de nuevo con gol en la prórroga, a Argentina y el arquero de la ‘Albiceleste’ era Sergio Romero, el portero del Mónaco de Francia, en ese momento compañero de Falcao García y James Rodríguez en el club del Principado.

Y ahora la maldición la confirmó Subasic, quien desde el 2012 llegó a Francia para jugar en el Mónaco, de hecho Romero fue mucho tiempo suplente del croata y de nuevo, confirmando la maldición, el arquero del Mónaco francés perdió la final del Mundial 2018, contra Francia, que en su equipo tenía tres arqueros del PSG, Lyon y el titular y capitán del Tottenham Hotspur.

Los campeones

La Selección de Francia se coronó campeona con un equipo joven, pero lleno de talento, con la figura de Kylian Mbappé como el referente, pero también con Hugo Lloris, Raphael Varane, N’Golo Kanté y Antoine Griezmann.

El arquero del Tottenham Hotspur de la Liga Premier de Inglaterra, club con el que lleva cinco temporadas siendo figura y al que llegó proveniente del Lyon francés, se inscribió en la élite mundial como principal figura, con grandes atajadas para que Francia levante su segunda Copa de Campeones.

Lloris atajó seis de los siete partidos del Mundial en Rusia, porque en la tercera fecha de la fase de grupos se dio el lujo de descansar y darle lugar a Steve Mandanda, teniendo en cuenta que Francia se clasificó de forma anticipada a la fase de octavos de final.

Pero la seguridad de Lloris también se debió al gran momento de sus defensas, tanto Samuel Umtiti, como Raphael Varane, los estelares del Barcelona y el Real Madrid, una pareja de lujo, digna de un campeón mundial, que no sólo ofreció tranquilidad atrás, sino que también aportó en ataque, porque Varane abrió el marcador en cuartos contra Uruguay y Umtiti festejó el de la clasificación a la final contra Bélgica.

Al aporte de la defensa se suma el equilibrio de N’Golo Kanté, comparable con Claude Makelele, un volante de marca moderno, que quita, corre, lo deja todo y entrega bien el balón, con dos complementos ideales a los lados, Blaise Matuidi y Paul Pogbá, para dar el primer pase a los talentosos.

El tridente de ataque, liderado por la nueva joya del fútbol mundial, Kylian Mbappé, también contó con la calidad de Antoine Griezmann, el delantero del Atlético de Madrid que ha sido tentado por los clubes grandes de Europa, con más fuerza para el Barcelona, pero que ha decidido continuar como ‘colchonero’, aunque ahora como campeón mundial su cotización creció más.

El equipo francés fue el más compacto y completo del Mundial, con figuras en todas sus líneas, porque los laterales, Benjamin Pavard y Lucas Hernández, también ofrecieron un gran aporte, de hecho Pavard está en concurso por adjudicarse el mejor gol del Mundial, el que le hizo a Argentina.