Las cifras son contundentes. La canasta familiar ha subido considerablemente, y según datos oficiales, la inflación de los últimos 12 meses fue de 7,45%, impulsada, principalmente, por el alza en el precio de los alimentos, que registró una variación del 12,26%.

Hechos como el fenómeno de ‘El Niño’, que ha originado una fuerte sequía, y la subida del dólar -cuyo promedio de cotización ya superó los $3.400- han incidido en que los alimentos estén caros y muchos hogares se vean “a gatas” con tal de que el dinero alcance.

“En septiembre, yo hacía mercado para 15 días con 250 mil pesos; ahora, con lo caro que está todo, esa suma me alcanza para unos 10 días”, comenta Carolina Mejía, administradora turística y madre de dos niños.

Las familias, aconseja el experto en finanzas Roberto Morrinson Delgado, deberán adaptarse a esa nueva realidad, y ajustar sus bolsillos para sobrevivir y llegar a fin de mes.

“No se trata de no comer, sino de cambiar nuestros hábitos. También de incluir, a partir de ahora, pautas de ahorro en temas como servicios públicos, diversión y demás. Esta es la mejor opción para ahorrar y ayudar a que el sueldo alcance”, asegura.

En la plaza

Recientemente, el ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, aseguró que los almacenes de cadena estaban abusando de la subida de precios y haciendo la canasta familiar aún más cara. Fenalco salió en defensa del sector y explicó que la intermediación, la calidad del producto, entre otros factores, hacen que, en efecto, el precio en una plaza y un supermercado sea diferente.

Sin embargo, en ocasiones, esta diferencia de precios puede ser de casi el doble. Es el caso de la papa, que en Corabastos, en Bogotá, cuesta cerca de $1.300 la libra, y en un supermercado en el Norte de la capital puede valer alrededor de $2.500 pesos.

Por ello, un consejo para quienes han sentido la carestía y necesitan ahorrar radica en adquirir los productos alimenticios en las plazas, los mercados campesinos o las tienda del barrio.

“Indiscutiblemente, la intermediación es mucho menor en estos sitios, así que siempre será más económico”, asegura Morrinson.

Por su parte, Julio Sanclemente, administrador de empresas y desarrollador de planes de ahorro para empresas y familias, asegura que, en definitiva, productos como la carne, el pescado, las frutas y las verduras es más económico adquirirlas en la plaza. “El ahorro puede llegar a ser hasta de un 30%”, asegura.

Otro consejo es adquirir productos de temporada. “No es lo mismo comprar, por ejemplo, mango, que está barato porque es la época en la que hay mucha oferta, que mora, la cual está escasa. Allí se ahorra”, anota Roberto Morrinson.

Igualmente, aconsejan bajar la compra de productos alimenticios importados. “El dólar ha subido más de un 40% durante el último año. Esto quiere decir que todo lo que se adquiere en el extranjero es más costoso; por ello, si quiere ahorrar, deje de lado todos esos productos. En estos momentos, lo mejor es comprar nacional, es más económico”, puntualiza el experto.

Ahorro

En épocas difíciles, los pequeños ahorros pueden hacer grandes diferencias.

Adolfo Infante, consejero en finanzas personales, asegura que, efectivamente, algunas ideas, que incluso pueden llegar a parecer simples, pueden ayudar (ver lista).

“Son pequeños ahorros que pueden hacer las familias, que a la largan significan mucho dinero. Los factores de éxito son dos: la constancia de hacerlo y la suma de hacer todas ellas como un ritual”, agregó.

Recuerde que no se trata de dejar de comer o darse gustos de vez en cuando, sino de organizarse, elegir mejor y no ser impulsivo al comprar. Así, el dinero le rendirá más.

Los gastos que más influyeron en el repunte de la inflación

La inflación de los últimos 12 meses, que tuvo una variación de 7,45%, fue jalonada principalmente por el alza en los precios de los alimentos, que tiene como causa principal la fuerte sequía generada por el fenómeno de ‘El Niño’.

En efecto, este grupo de gasto registró la mayor variación durante ese periodo (12,26%), y dentro de él, el subgrupo que más incrementó sus precios fue el de hortalizas y legumbres (43,25%). Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, los gastos básicos con mayores incrementos durante los últimos 12 meses fueron cebolla (69,92%), tomate (67,76%), otras hortalizas y legumbres secas (55,60%), otros tubérculos (53,04%) y fríjol (45,79%).

Solo en enero, la variación de los precios de los alimentos fue de 2,82%, también la más alta de los grupos analizados por el Dane. Ese mes, el principal incremento lo tuvieron los tubérculos y plátanos (19,34%), como subgrupo. En materia de gastos básicos, los mayores incrementos fueron los de la papa (31,83%), las naranjas (16,58%), otras hortalizas y legumbres secas (15,87%), las moras (12,35%) y el tomate de árbol (12,30%).

El otro grupo de gastos que más aumentó sus precios durante el primer mes del 2016 fue salud, con 1,49%. En él, los subgrupos con mayores variaciones correspondieron a gastos de aseguramiento privado y otros gastos (2,85%), bienes y artículos (1,08%) y servicios de salud (1,04%)

Por su parte, los grupos de gasto diferentes a alimentos tuvieron las siguientes variaciones de precios, en los últimos 12 meses: salud (6,08%), vivienda (6,05%), diversión (5,28%), educación (5,16%), comunicaciones (5,0%), transporte (4,51%), vestuario (3,45%) y otros gastos (7,50%). Cabe destacar que la inflación en alimentos y otros gastos superó la inflación total.

Entre tanto, los gastos básicos diferentes a alimentos que más aumentaron sus precios en el último año fueron gas (21,06%), vehículos (15,43%), energía eléctrica (12,99%), almuerzo (6,86%), arrendamiento efectivo (4,01%) y arrendamiento imputado (3,93%).

Cabe destacar que en los últimos 12 meses, la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) sin alimentos fue del 5,54%, superior en 2,34 puntos porcentuales a la registrada en enero de 2015 e inferior en 1,01 puntos porcentuales al IPC total de enero de 2016 (7,45%).

Finalmente, en cuanto al comportamiento del IPC en los últimos 12 meses según el nivel de ingresos, todos registraron crecimientos superiores a los observados en el mismo periodo del año anterior: ingresos bajos (8,01%), ingresos medios (7,16%) e ingresos altos (7,31%).

Cinco consejos para que su bolsillo no se afecte

1 Antes de salir de compras, es recomendable hacer una lista de lo necesario y ajustarse a ella, para evitar compras innecesarias.

2 Ahorre en servicios domésticos como el agua, la luz y el gas. Será necesario hablar con la familia, para evitar gastos innecesarios. Apagar la luz al salir de una habitación o cerrar el paso del gas en el calentador automático de agua al salir de fin de semana pueden ser medidas de ahorro.

3 El entretenimiento familiar también es un aspecto que puede significar un porcentaje importante en el gasto mensual, por lo cual sería conveniente buscar nuevas formas de diversión durante el periodo financiero crítico. Las salidas a museos, parques nacionales, la cultura al aire libre, etc., suelen ser gratuitos y de gran calidad.

4 Sustituya algunas funciones que hoy cumplen los electrodomésticos. El ejemplo más claro es la secadora de ropa: en vez de usarla, séquela al aire libre.

5 Trate de eliminar los restaurantes de su presupuesto. Hacer la comida en casa y llevarla a la oficina es una excelente opción y significa ahorrar, al menos, cinco mil pesos diarios.