S.O.S. por los ríos

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Muchas personas han convertido las fuentes hídricas en basureros, olvidando que son un recurso natural de vida. Por causas naturales, geoquímicas o la acción directa del hombre, son las razones más comunes de la contaminación en los ríos.

LUISA FERNANDA RUIZ

A pesar de los mensajes y campañas de sensibilización ambiental para el cuidado y preservación de las fuentes hídricas, se continúa viendo gran contaminación en estos lugares. Lo lamentable de esta situación, es la indiferencia ante esta problemática y el poco interés que se percibe, por parte de algunos, por cambiar este panorama desalentador.

¿Acaso se ignora que la vida, la salud y el bienestar depende del agua limpia y fresca que se tenga?, ¿Por qué cada día se abusa más y más de las fuentes de agua dulce?, ¿Se olvida que las fuentes hídricas son indispensables para sobrevivir?

Una de las causas de la contaminación es la inconsciencia del hombre, siendo indiferente de lo importante que es este recurso natural para la supervivencia humana.

Al visitar los ríos y arroyos, en los que se espera encontrar agua fresca, limpia y natural, se presencia un panorama totalmente diverso, pues muchos de estos lugares están convertidos en vertederos de desechos, viviéndose un desequilibrio ecológico.

Pero esta no es la única importancia que se tiene de cuidar los ríos o lagunas, ya que estos son el hábitat de especies acuáticas que se han visto afectadas a consecuencia de la contaminación causada por las tuberías de las industrias, las alcantarillas, aguas negras, el derrame de hidrocarburos y el vertimiento de población ribereñas.

Tome conciencia y haga su aporte para minimizar esta problemática que se vive desde hace muchos años en el planeta.

Incidencias de que se acaben las especies

De acuerdo con Marlon Serrano Gómez, experto en Tecnologías Limpias del ICP, “un ecosistema natural presenta un equilibrio ecológico, esto quiere decir que todo organismo o toda especie cumple una función generando la dinámica del ecosistema, productores-consumidores o herbívoros-carnívoros, y el perder una especie crea un desequilibrio en dicha dinámica. Es decir, un grupo de organismos de una misma especie es una población y grupos de organismos de diferentes especies es una comunidad, entonces al no tener una población se ven afectadas otras, se puede generar una sobrepoblación de una o alguna especie favorecida por la ausencia de otra especie y esto al final puede generar su misma eliminación, se pierde el control biológico de la cadena alimenticia y por eso es fundamental mantenerlas a todas”.

Otro punto importante, según Serrano Gómez, es la introducción de especies exóticas de otros países, otros ecosistemas que se adaptan fácilmente y por competencia pueden desplazar, reducir o eliminar especies nativas. “Por ejemplo, la mojarra roja y plateada, siendo de África e introducidas en Colombia y en estos momentos distribuida ampliamente en el territorio nacional, afectando las comunidades acuáticas endémicas”.

“Para que se acabe una especie es porque no existe oferta alimenticia, algunos peces son específicos en su alimentación, al eliminar su oferta por cualquier razón (contaminación, cambios en el ecosistema, etc) puede afectar una especie y el equilibro se rompe, el cual al final la dinámica del ecosistema cambia y aquellas especies que se adaptan al cambio sobreviven aquellas que no mueren”.

Para tener en cuenta…

Marlon Serrano Gómez, experto en Tecnologías Limpias, brinda algunos consejos sobre los cuidados que se deben tener con los ríos, lagos y lagunas, y así evitar hacerle daño a las especies:

-No contaminarlos con vertimientos industriales ni domésticos o residuos. “Sin embargo, todo cuerpo hídrico presenta su resiliencia (capacidad de autorecuperarse) pero si la carga es mayor a la velocidad de recuperarse, se rompe el equilibrio y el ecosistema se deteriora.

-Cuidar, proteger, conservar o mantener en buenas condiciones los bosques riparios (localizados en las márgenes de los ríos) para evitar desbordamientos y de esta manera se asegura la regulación hídrica del ecosistema. “En verano se mantiene la columna de agua más reducida, pero no tan considerable donde se genera la eutrofización y la vegetación invasora reduce el espejo de agua o área de cuerpo hídrico, sin embargo, este proceso se da de manera natural, aunque se acelera por las descargas sobre los cuerpos de agua”.

-No hacer sobreexplotación. “Muchas veces las poblaciones de peces son diezmadas por sobrepesca y mal manejo (capturando peces inmaduros o no respetando la veda o capturando las hembras llenas de huevos), reduciendo la población.

Algunos de los ríos más contaminados del Mundo Salween: Danubio: Río de la Plata: Ganges: Yangtze:

El Libro Rojo de Peces Dulceacuícolas de Colombia, 2012 es el resultado de una investigación, cuyo objetivo es proporcionar herramientas que contribuyan a promover y asegurar la conservación, el fomento y el aprovechamiento racional de los recursos hidrobiológicos colombianos.

De acuerdo con la investigación, liderada por el Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt, el Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Colombia, la Universidad de Manizales y WWF Colombia junto con investigadores pertenecientes a instituciones académicas, gubernamentales y no gubernamentales, las especies en peligro de extinción son:

1. Pez graso, runcho. La especie fue categorizada como extinta en la Lista Roja de Especies Amenazadas de Uicn.

2. Bagre rayado, bagre, pintadillo. Emblemático del Magdalena, es la especie de mayor tamaño en la cuenca, alcanza a crecer hasta 1.5 m de longitud. Esta categorizada en Peligro Crítico de extinción.

3. Sabaleta de piedra. Se encuentra en peligro de extinción. Habita en el río Cauca en Cáceres, Antioquia.

4. Jetudo (Valle)

5. Pataló (cuenca del Magdalena)

6. Pataló hocicón (Santander)

7. Besote o jetón (Ranchería) está en amenaza de extinción

8. Bagre de río, bagre cazón y bagre blanco. Se aloja en las cuencas del Atrato y Magdalena, y según la publicación ‘El libro rojo de peces dulceacuícolas’ está en peligro de extinción.

9. Arauana azul. Tiene distribución restringida, se encuentra en la cuenca del Orinoco. Es sometida a una fuerte presión pesquera por el alto valor económico de sus alevinos y juveniles en el mercado internacional de ornamentales.

10. Totumito, abramite, bonito y viejo. La sedimentación y la minería son sus mayores amenazas en las ciénagas de la cuenca baja del río Magdalena; debido a la deforestación de las cuencas y aumenta la sedimentación de la cubeta de la ciénaga.

Marlon Serrano Gómez

Profesional de Tecnologías Limpias ICP

¿Qué afectaciones comunes se presentan en los ríos?

Se presentan hace muchos años el deterioro de la calidad ecológica de los ríos por los aporte permanentes de aguas residuales domésticas sin tratamiento, el aumento de nutrientes por estas aguas residuales, y de sustancias o compuestos contaminantes como jabones, grasas y aceites, y metales, los cuales se generan por múltiples actividades domésticas e industriales. Sin embargo, la ley obliga a las industrias a tratar sus residuos líquidos, pero la norma ambiental de vertimientos es muy laxa. En estos momentos se espera que para este año se publique la nueva norma ambiental de vertimientos líquidos, la cual será mucho más exigente que la actual.

¿Qué se debe tener en cuenta a la hora de pescar y no afectar a los peces?

El tamaño y la madurez. Los pescadores para tener algo para comer o vender no les importa capturar individuos pequeños (inmaduros), por ello se dan las vedas, para proteger o tratar de mantener la especie para que lleguen a la madurez y puedan reproducirse para conservarlas. Sobre todo aquellas que migran para reproducirse como es el caso del bocachico (especie tan apetecida comercialmente). En la época de reproducción no se deberían capturar aquellos que tengan huevos porque no les dan la oportunidad de desovar y por consiguiente no se asegura la continuidad de futuras generaciones y de la especie.

¿La sobrepesca de peces es una mala práctica?

Sí, porque si la captura supera la velocidad de reproducción como pasa en muchas ciénagas y ríos, las poblaciones se reducen y por ello los pescadores después de un tiempo dicen que ya no hay peces, que se abanaron y la culpa se la adjudican a lo demás pero nunca analizan las malas prácticas de ellos. Sin embargo, la sobrepobación humana, los malos manejos y la contaminación genera el deterioro del agua y por consiguiente la afectación de las comunidades acuáticas.

Credito
EL NUEVO DÍA

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