Esto ya que siguen encargados José Antonio Cepeda en el caso de Luis Ernesto Vargas e Iván Escrucería en reemplazo de Jorge Palacio. El lío es que en la Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia, encargada de hacer las ternas para estas dos plazas, aún no hay un acuerdo para lograr su conformación.

Hasta el momento, ninguno de los aspirantes ha obtenido los 16 votos requeridos y solo hasta la otra semana habrá una reunión para intentarlo de nuevo.

Los nombres que más han sonado para la plaza de Jorge Iván Palacio son el exmagistrado del Consejo Superior Judicatura Wilson Ruiz, el excontralor de Bogotá Diego Ardila, y la exviceprocuradora Martha Castañeda.

Por el lado de Vargas Silva, los candidatos votados, aún sin mayorías son Álvaro Motta, la jurista Diana Fajardo y Carlos Ardila Ballesteros.

Con la próxima posesión de Pardo y Bernal deberán salir del encargo Hernán Correa y Aquiles Arrieta, ambos magistrados auxiliares de la Corporación.

Las ideologías

Por el lado de las ideologías, Pardo es de línea conservadora, aunque en los cruciales temas de paz deberá declararse impedida por haber participado en la elaboración de varios proyectos como el de la Jurisdicción Especial para la Paz.

Pardo llega a ocupar la plaza del suspendido magistrado Jorge Pretelt, quien también era conservador, aunque ya anunció que sus posiciones seguirán por la línea jurisprudencial ya establecida en materia de derechos y libertades.

Bernal, aunque cristiano, es considerado de una línea más liberal y ante todo es reconocido por ser un académico y especialista en derechos humanos. El profesor Bernal llega a la plaza de María Victoria Calle.